Un agente que trabaja en el Servicio Marítimo de la Guardia Civil del Campo de Gibraltar denuncia la situación. “Hemos demandado un protocolo de cooperación. España y Gibraltar tienen que hablar y dialogar. ¿Tenemos que entrar en aguas gibraltareñas? Nuestros mandos superiores tienen que decirnos cuáles son los límites de nuestras aguas. Tiene que haber un acuerdo que tampoco vea mermada la soberanía y la seguridad. Lo que se demanda es que los narcotraficantes no anden a sus anchas”, explicó a El Confidencial.
El Servicio Marítimo de la Guardia Civil funciona desde hace 20 años en la zona, punto caliente de delincuencia internacional. En España se incauta la mitad del hachís de todo el mundo, y más del 70% de esta droga entra por la provincia de Cádiz. En los últimos años la tradicional ruta del hachís se ha utilizado para introducir también cocaína. “Necesitamos más y mejores efectivos. La zona así lo demanda. Aquí actúan mafias organizadas que están asentadas en Marruecos y Gibraltar. Nunca podemos olvidar que estamos a tan sólo 14 kilómetros de África”, cuentan fuentes del Instituto Armado de Algeciras.
Joseph Garcia
Por su parte el líder del Partido Liberal del Peñón, el miembro de la oposición Joseph Garcia, emitía ayer su discurso de Año Nuevo y en él hacía referencia a esta cuestión. Declaró que “España ha pasado de reclamar que las aguas son suyas a actuar como si realmente lo fueran”.
Concluyó García asegurando que la situación que se ha vivido en los últimos tiempo “no dice mucho del supuesto nuevo clima de relaciones” entre España y Gibraltar.