El fondo inversor catarí construirá la nueva marina náutico deportiva de San Andrés

La Autoridad Portuaria de Málaga ha adjudicado este viernes la construcción y explotación de la nueva marina náutico-deportiva de San Andrés a Marina Málaga San, SL, encabezada como grupo inversor por la empresa catarí Al Alfia.

A esta firma la acompañan en el grupo adjudicatario Island Global Yachting (IGY) como socio tecnológico, y Ocean Capital Partners (OCP) junto a Estudio Seguí Arquitectura como ingeniería del mismo, ha informado la Autoridad Portuaria en un comunicado.

La futura concesión contará con una superficie de dominio público portuario de 123.935 metros cuadrados, divididos en 96.071 metros cuadrados de lámina de agua y 27.864 metros cuadrados de zona terrestre, y capacidad para 566 embarcaciones de recreo entre ocho y 30 metros de eslora.

La marina náutico deportiva de San Andrés estará destinada a un uso ciudadano-portuario, que incluirá un complejo náutico con una escuela de vela y otras enseñanzas del mar, zona de restauración, pequeño comercio y tiendas especializadas, así como un club social.

La dársena dispondrá, además, de diversos espacios para un uso exclusivamente portuario, como una torre de control, naves para talleres y almacenes, así como una marina seca con capacidad para acoger trescientas embarcaciones.

Se calcula que el impacto socio-económico total, durante el periodo de concesión de cincuenta años, sea de 785,9 millones de euros, lo que supone unos 15,7 millones al año.

También se prevé generar un empleo directo anual de 70 personas, a lo que se añade un empleo indirecto de 590 trabajadores y un empleo inducido de otros 741.

Este puerto deportivo se enmarca en el proyecto del Plan Especial del Puerto de Málaga para revitalizar la zona oeste del dominio público-portuario, correspondiente a la plataforma de San Andrés, en el que también se ubicarán un auditorio, un edificio cultural y la sede del Instituto Oceanográfico, esta última ya en su última fase de construcción.

La Autoridad Portuaria prevé una gran acogida del nuevo puerto deportivo, ya que se encuentra en una situación estratégica con amplias conexiones, entre las que destaca su proximidad a la estación de ferrocarril María Zambrano, lo que supone una oportunidad para clientes, entre otros, de la Comunidad de Madrid.