Agricultores, organizaciones agrarias y comunidades de regantes de la provincia de Alicante, de Almería y de la Región de Murcia se han concentrado este martes en la Plaça de la Muntanyeta de Alicante para reivindicar la continuidad del trasvase Tajo-Segura, en una protesta a la que han sumado una decena de tractores y un remolque con 8.000 kilos de naranjas, que han echado por tierra, y en la que han exhibido pancartas con los lemas 'Defendamos todos la huerta de Europa', 'Partidos políticos, mercenarios del agua' o 'Recortes trasvase= más paro' o 'Más desalación= más contaminación'.
A la concentración, convocada por Asaja-Alicante, SCRATS, Riegos de Levante Margen Derecha, Riegos de Levante Margen Izquierda y Junta Central de Usuarios del Vinalopó, se han unido representantes políticos como la consellera de Agricultura, Mireia Mollà; la nueva titular de Innovación y Universidades, Josefina Bueno; el presidente de la Diputación de Alicante y líder del PPCV, Carlos Mazón; el presidente de la Región de Murcia, Fernando López-Miras; las síndicas de PSPV, Ana Barceló (que se incorpora este miércoles), la de Cs, Ruth Merino, y la de Vox, Ana Vega y la adjunta de Compromís, Aitana Mas, entre otros cargos.
También ha acudido la delegada de la Junta de Andalucía en funciones de Almería, Aránzazu Martín, y el director general de Planificación y Recursos Hídricos de la Consejería de Agricultura andaluza, Fernando Delgado.
Durante la protesta, los regantes han mostrado su descontento hacia el Botànic y el Ejecutivo central, con gritos de "fuera Compromís" y "tarjeta roja al Gobierno y al PSOE" mientras sus representantes atendían a los medios, y algunos han mostrado pancartas en contra de PP, PSOE y Cs por "votar en contra del trasvase" en Castilla-La Mancha.
Los regantes han exigido este martes una actuación por parte del Gobierno "ajustada y justa" en relación a esta infraestructura y le piden que "aplique lo que ha aplicado en toda la planificación española" para que "no se atiendan los intereses políticos del gobernante de turno", en referencia al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
También han criticado los caudales ecológicos y han reclamado al Ejecutivo "justicia" y "criterios técnicos" para la planificación hídrica del país. "No hay que levantar caudales ecológicos, hay que invertir en una buena depuración del agua, por ello reclamamos justicia y que apliquen los mismos criterios a todos en el país" ha señalado el presidente del sindicato de Regantes (Scrats), Lucas Jiménez.
De este modo, ha lamentado que "en ningún lado del país se han elevado los caudales ecológicos, sólo en tramos que afectan al río Tajo y al Segura", una situación que "no beneficia en nada a la cuenca del Tajo ni a Castilla-La Mancha", sino "sólo a los intereses políticos de los gobernantes manchegos".
"Page lanza mensajes que rozan la injusticia, de muy mal gusto, por esto estamos todos unidos, por nuestro futuro y para reclamar justicia y criterios técnicos para planificar la política hídrica de nuestro país, porque no podemos asumir que por caprichos políticos miles de personas se vayan al paro", ha agregado Jiménez, quien ha concluido que el Ministerio "parece que está dispuesto a asumir todo esto para satisfacer los intereses políticos del presidente de Castilla-La Mancha".
Por su parte, el presidente de Asaja Alicante, José Vicente Andreu, ha explicado que la concentración tiene como objetivo "hacer ver al presidente del Gobierno que el Levante español está unido por el bien común y por mantener una infraestructura tan esencial como es el trasvase Tajo-Segura".
"No hay justificación alguna intentar reducir los caudales que llegan hasta aquí basándose en unas pretensiones que no existen" porque "el alto Tajo está perfectamente equilibrado y el agua es de buena calidad", ha expresado. A su juicio, "el problema que tiene es la mala depuración del agua que viene de Madrid, no puede el Gobierno aprobar dos planes de cuenca que son contradictorios. Hay que encontrar un equilibrio entre ambos y el Gobierno debe respetar el desarrollo del Levante español", ha agregado.
Por último, ha insistido en que "sin trasvase no podemos sobrevivir" y que "la desalación es un complemento pero no puede ser nunca la alternativa" porque "es contaminante y tiene un precio que los agricultores no podemos pagar y no podemos competir". Así, ha reclamado "respeto" para el campo y para los agricultores por su "labor productiva".
JÚCAR
Por otro lado, la Unió de Llauradors ha mostrado su oposición "de forma frontal" al trasvase "encubierto" que se pretende realizar desde la Acequia Real del Júcar a Almería, mediante una cesión de derechos de agua, porque las necesidades de los regantes de la Comunitat Valenciana "no están todavía cubiertas y existen zonas con un evidente déficit hídrico".
La organización ha explicado en un comunicado que, en principio, durante al menos cinco años, se pretende llevar 10 hectómetros cúbicos de agua desde el Júcar hasta el Almanzora almeriense. El agua se vendería entre 0,27/0,30 euros/metro cúbico y se quiere lograr 15 millones de euros (3 millones de euros anuales) "con la excusa de llevar a cabo la modernización de regadíos", cuando ese agua "no servirá para regar nuestras tierras, ni para regenerar la Albufera, ni para aumentar el caudal del Júcar".
"No puede ser que estemos manifestándonos en Alicante por los recortes del Tajo que reducirán la transferencia a las comarcas alicantinas, que los regantes del Vinalopó sigan con dificultades para regar, que nos opongamos a que se esquilmen los acuíferos del Júcar en la Mancha oriental y mientras tanto algunos se dediquen a vender el agua a otras comunidades en una maniobra que al final lo que trata es de lucrarse con este bien público, que es de todos los regantes", ha criticado el dirigente Carles Peris.
"EN ALMERÍA NOS JUGAMOS MUCHO"
La delegada en funciones de la Junta de Andalucía en Almería, Aranzazu Martín, ha acudido al encuentro para mostrar su apoyo a la agricultura almeriense. "No solo apoyamos al sureste español sino a nuestro levante almeriense, donde nos estamos jugando el agua de más de 130.000 ciudadanos y más de 20.000 hectáreas de riego de cultivos", ha asegurado.
Para Martín, las decisiones que está adoptando el Ministerio en relación al trasvase Tajo-Segura "están basadas más en cuestiones ideológicas que en cuestiones científicas. Desde Andalucía siempre nos hemos opuesto al criterio del Gobierno del aumento de los caudales ecológicos que lo que hace es recortar el agua a nuestros regantes. Vamos a estar siempre con Murcia, la Comunidad Valenciana y todo el sureste, apoyando los intereses de nuestros agricultores, porque en Almería nos jugamos mucho", ha añadido.
Por su parte, el director general de Planificación y Recursos Hídricos de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Fernando Delgado, ha coincidido en subrayar la importancia de "apoyar a la agricultura andaluza y, en particular, la almeriense. "Como responsable de la planificación hidrológica de las cuencas andaluzas pensamos que la planificación se tiene que hacer con el consenso de todos y buscando también la satisfacción de las demandas y no solo con aspectos ideológicos", ha dicho.
FACPYME Y CEV
También han acudido a la concentración representantes de la patronal de empresarios, como el presidente de la CEV, Salvador Navarro, y el presidente de Facpyme, Carlos Baño. Ambos han expresado el respaldo de la Federación y del conjunto del tejido empresarial de la provincia a las organizaciones agrarias y regantes.
"Existe un clamor unánime en la provincia de Alicante en contra de recortar los aportes del Tajo al Segura y exigimos que el Gobierno Central nos escuche y rectifique", ha resaltado Baño.