La morosidad financiera en España se situará en el 4,5% en 2023, mientras que los préstamos bancarios caerán un 1,3%, según se recoge en el informe 'Ey European Bank Lending Economic Forecast', elaborado por EY y que recoge previsiones sobre el sistema financiero de la eurozona para los próximos años.
A falta de un mes para que termine el año, la firma cree que el volumen de financiación bancaria a empresas y familias descenderá en España un 0,2% en el conjunto de 2022, mientras que la morosidad cerrará en torno al 3,9%. Cabe recordar que en mayo, la consultora preveía que la tasa de mora bancaria se elevaría hasta el 4,6% este año, si bien hasta septiembre esta métrica se situaba en el 3,79%, marcando su nivel mínimo desde diciembre de 2008.
Más allá de la contracción de la financiación en 2022 y 2023, el informe prevé que el volumen de crédito bancario al sector privado se recupere a partir de 2024, con un aumento del 2%. En cuanto a la morosidad, EY cree que siga aumentando de forma paulatina hasta el 5,5% en 2026, aunque son cifras que están "lejos" de las alcanzadas en la última crisis financiera.
Por líneas de actividad, la consultora espera que los préstamos a empresas no financieras se reduzcan el próximo año un 2%, los créditos al consumo un 1,1% y las hipotecas un 0,6%.
Sobre el mercado hipotecario, el informe se hace 'eco' del acuerdo firmado entre el Gobierno y la banca española para apoyar a las personas con dificultades para el pago de su cuota hipotecaria ante la subida de tipos de interés. En este sentido, destaca que recientes datos del informe sobre los préstamos del Banco Central Europeo (BCE) sugieren que la debilidad de la demanda de hipotecas en España es menos marcada que en Alemania y Francia.
"A diferencia de sus homólogos europeos, España tiene una alta exposición a las subidas de tipos del BCE, ya que aproximadamente el 90% de los titulares de hipotecas en España tienen contratos a tipo variable. En este punto, cabe destacar el acuerdo alcanzado hace unas semanas por el Gobierno y el sector financiero para atenuar el impacto en los consumidores más desfavorecidos de estas subidas", ha comentado el socio responsable del sector financiero de EY España, Pedro Pérez.
Al igual que en los principales países de la zona euro, EY espera una vuelta al crecimiento en todas las formas de préstamo en 2024 en España, con un incremento del 1% en las hipotecas, del 2,6% en los créditos al consumo y del 2,8% en los préstamos a las empresas. Además, prevé que el total de préstamos aumente un 3,4% en 2025, y un 2,8% en 2026.
Con respecto a la situación económica actual, el informe resalta que, en comparación con otros países europeos, España está menos expuesta a la posible escasez de gas, aunque no descarta un impacto por los altos precios de la energía, el debilitamiento de la confianza de los consumidores y la elevada inflación. A pesar de ello, la consultora cree que la economía española crecerá un 0,8% en 2023.
Pérez sostiene que España se enfrenta a una "leve recesión" este invierno debido a las elevadas facturas energéticas, las estrictas condiciones financieras, una menor confianza del consumidor y a la alta inflación. "Todavía está por ver el impacto en las cuentas de resultados de las entidades financieras derivado de la desaceleración y el probable incremento de la morosidad, si bien, creemos que las firmas españolas están en mejor disposición para enfrentarse a estas externalidades macroeconómicas que hace unos años", ha agregado.