Almería

La Junta culminará antes de final de año la obra de emergencia de la carretera A-1205 en Pulpí

Las obras han alcanzado su ecuador (49 por ciento) y culminarán antes de finalizar el año tras una inversión de 107.600 euros

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
  • Desprendimientos en el talud de la A-1205 en Pulpí. -

El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento de las obras de emergencia en la carretera A-1205 de la provincia de Almería para reparar los daños por deslizamiento que ha sufrido la vía, que comunica Pulpí con la pedanía Pilar de Jaravía.

Las obras han alcanzado su ecuador (49 por ciento) y culminarán antes de finalizar el año tras una inversión de 107.600 euros, según ha indicado la Junta en una nota.

La carretera sufrió el pasado 28 de noviembre, a la altura de su kilómetro 6,4, un deslizamiento de grandes dimensiones en el talud de la margen derecha que ha afectado por completo al tronco, lo que obligó al corte de la vía y a habilitar desvíos dado el grave peligro que suponía para los conductores.

La intervención se declaró de emergencia porque, de no actuar, se corría el riesgo de nuevos desprendimientos. Además, era inviable mantener el corte de la carretera al provocar graves perjuicios sociales y económicos en la zona, ya que esta vía, que soporta un tráfico diario de 4.563 vehículos (nueve por ciento de ellos pesados), no solo comunica Pulpí con el núcleo de Pilar de Jaravía, sino también con grandes centros de atracción turística de la provincia de Almería como la Geoda de Pulpí, declarada como Monumento Natural de Andalucía.

La causa detonante de este desprendimiento se atribuye a una serie de movimientos sísmicos en el Mar de Alborán con una magnitud de 2,5 en la escala Richter y a escasa profundidad. Este fenómeno, ligado a la avanzada meteorización del talud, ha hecho que se genere un movimiento de grandes dimensiones.

La existencia de los elementos de contención, compuestos por mallas de triple torsión, han minimizado los daños, pero no se han podido evitar en su totalidad.

Las obras, adjudicadas a la UTE formada por las empresas Aquaterra y Napal, han consistido en la retirada y limpieza del material desprendido y el saneo y excavación del talud de la zona afectada para su estabilización. Solamente quedan los trabajos de hormigonado y de colocación de la malla, que durarán dos semanas.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN