Preguntado sobre la decisión tomada ayer por el Consejo General del Poder Judicial de suspender cautelarmente a Garzón, el jurista señaló que todo el problema parte de la equivocada decisión de abrirle una causa penal por la interpretación de la ley.
Consideró que la vía penal no era la apropiada para el caso del juez Garzón, por tratarse de un tipo de sanción “muy grave y excepcional”.
El hecho de que “un juez sufra la amenaza de un proceso penal por la simple interpretación de una ley y de su propio rol supone un problema para la independencia de la Justicia en España”, manifestó Staberock.
“Espero que el Tribunal Supremo lleve adelante un proceso con todo el respecto del derecho internacional y su decisión refuerce a la Justicia”, agregó.
Para el representante del CIJ, en cualquier Estado democrático la capacidad de interpretar una norma se encuentra dentro de las funciones “de un verdadero juez de instrucción”.
Por otra parte, el ex fiscal jefe Anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo, aseveró que la independencia judicial “ha quedado maltrecha”.
“Parece que interpretar la ley fuera de los parámetros ortodoxos que imponen esos supuestos jueces sabios que constituyen el Supremo, no permite que sigan en sus puestos como jueces aquellos que han hecho una interpretación de la ley avanzada, progresista y de acuerdo a los tratados internacionales”, opinó en este sentido Villarejo.