El PSC y el PP han facilitado así el nombramiento en primera vuelta en un gesto de normalidad institucional y para asegurarse su representación en la Mesa, mientras que Ciutadans (C's) ha querido contrastar la moderación de la actual presidenta, de UDC, con el papel más soberanista que, a su juicio, imprimió a la Presidencia del Parlament el independentista Ernest Benach.
En el arranque de la novena legislatura catalana, la ex consellera, emocionada en su toma de posesión como relevo de Benach, ha sido elegida en primera vuelta con el apoyo de 77 diputados -para la mayoría absoluta se necesitan al menos 68-, de los cuales 62 votos son de la federación de CiU, 3 de C'S y los otros 12, a partes iguales, han sido cedidos por PSC y PPC.
El resto de diputados del PSC y del PPC han votado en blanco, al igual que los de ICV-EUIA y ERC, lo que suma un total de 53 votos. También ha habido un voto nulo.
Sólo los cuatro diputados de la Solidaritat Catalana per la Independència que lidera Joan Laporta han votado a su candidato, el nuevo diputado Toni Strubell, y no a De Gispert.
En su primer discurso como presidenta del Parlament, De Gispert ha prometido aportar su particular visión femenina a la hora de ejercer su función, poniendo de relieve valores como la "cercanía", el consenso, la sensibilidad y las ganas de ir al grano.
Buena parte de su discurso, de 15 minutos, ha estado dedicado a reivindicar el papel de la mujer en la sociedad del siglo XXI y a hacer un llamamiento a "romper el techo de cristal" que sigue impidiendo alcanzar la "igualdad real" entre ambos géneros.
En esta nueva etapa de CiU al frente del Parlament han quedado fuera de la Mesa de la cámara ICV-EUiA y ERC, en donde CiU tiene así la mayoría absoluta -no la obtuvo en las elecciones- puesto que el órgano de gobierno ha quedado integrado por el vicepresidente primero, Lluís Corominas (CiU), y el vicepresidente segundo, Higini Clotas (PSC), además de cuatro secretarios, que son, de primero a cuarto: Jordi Cornet (PPC), Montserrat Tura (PSC), Josep Rull (CiU) y Dolors Batalla (CiU).
Cornet ha sido la sorpresa de la jornada puesto que ha sido el más votado en la elección de las cuatro secretarías al obtener 31 votos (los 18 que tiene el PPC, 3 de C's y otros 10 de CiU).
El mayor peso del PPC en el Parlament, tras sus mejores resultados en unas catalanas, ha quedado patente al ubicarse su líder, Alícia Sánchez-Camacho, en uno de los escaños del centro de la cámara, justo detrás de Artur Mas (CiU), un lugar mucho más visible que el tradicional lateral del hemiciclo.
La socialista Montserrat Tura se ha quedado con la segunda secretaría de la Mesa porque sólo ha contado con el apoyo de sus 28 diputados, mientras que los diputados de CiU Josep Rull (26) y Dolors Batalla (25) ocupan la tercera y cuarta, respectivamente.
ICV-EUiA y ERC han lamentado que, al no haber conseguido un puesto en la Mesa del Parlament, la pluralidad de la cámara catalana no se refleja en su órgano institucional y han coincidido en asegurar que este inicio de legislatura "no es esperanzador".
Para ligar el reparto de cargos en la Mesa ha habido así pactos a diferentes bandas, puesto que si bien se ha alcanzado un acuerdo a tres entre CiU, PSC y PPC, para la Presidencia y las vicepresidencias, también ha habido un pacto entre CiU y PPC para que Jordi Cornet se quede finalmente la secretaría primera de la Mesa.
Ciutadans ha abandonado su habitual oposición a los partidos tradicionales y ha apoyado el nombramiento de Núria de Gispert (CiU) como nueva presidenta del Parlament, de Higini Clotas (PSC) como vicepresidente segundo y de Cornet (PPC) como secretario primero.
La formación que lidera Albert Rivera ha logrado que CiU, PSC y PPC estén abiertos a estudiar una reforma o una nueva interpretación del reglamento de la cámara para permitir que C's tenga una autonomía que ahora no tiene en un Grupo Mixto que comparte con Solidaritat Catalana.
El reglamento de la cámara establece que las decisiones del Grupo Mixto se tomen por la mayoría del mismo, con lo que los tres diputados de C's siempre estarían en minoría frente a los cuatro de la Solidaritat de Joan Laporta, seguido hoy muy de cerca por los focos de las cámaras en su nueva etapa como político tras dejar la presidencia del Barça.
