Los valencianistas, en una competición menor a la que han estado acostumbrados estos últimos años, no pueden desaprovechar la oportunidad de volver a estar entre los más grandes del Viejo Continente y, aunque sea en la UEFA, los de Emery querrán seguir con la buena línea mostrada en Liga.
Mejor oportunidad tiene el Deportivo, que vuelve a una fase final en competición europea ante el Aalborg, un equipo danés que pudo empatar en la fase de grupos de la Champions ante el Manchester en Old Trafford. Los gallegos pueden encontrar en la UEFA la competición que complemente su buena racha en Liga.
Así, tal y como ordenaba el sorteo, ambos tenían que verse las caras contra rivales procedentes de la Liga de Campeones y contarán a su favor con poder disputar en su feudo los partidos de vuelta tras disputar la ida en tierras ucranianas y danesas.
Esa es quizá, la única ventaja que saquen chés y deportivistas de medirse a equipos de Champions. Dos equipos que podrían complicar la eliminatoria si hacen bueno el factor campo, donde la climatología puede ser fundamental a la hora de decidir un encuentro.
Tras los dieciseisavos, que se jugarán a doble partido los días 18 ó 19 y 26 de febrero, se sortearon los octavos, previstos para los días 12 y 18 ó 19 de marzo, en los que, en caso de victoria, el Valencia se medirá al vencedor del Sampdoria-Metalist Kharkiv, con la ida en Mestalla, y el Deportivo al del Copenhague-Manchester City, con la vuelta en Riazor.
En cuanto al resto de eliminatorias que ayer fueron sorteadas en Nyon, la más destacada fue el emparejamiento entre el alemán Werder Bremen y el italiano AC Milan, dos equipos más acostumbrados estas últimas temporadas a jugar la Liga de Campeones.
Los rossoneri no podrían hacer otra cosa que alcanzar las últimas rondas de esta competición para no firmar un fracaso europeo, aunque el Werder dificultará la empresa de los de Ancelotti, que, en caso de victoria, se medirían al ganador de la eliminatoria entre Olympiakos y Saint Ettiene.
