Si el Corredor Central es el proyecto de hoy, el Corredor Mediterráneo es el proyecto del futuro. Pero lo más importante y beneficioso para la comarca y su puerto es que el futuro llegue a plasmarse con los dos proyectos en funcionamiento, con la posibilidad de dar salida a las mercancías hacia el centro de la península y por la costa mediterránea hacia el resto del territorio nacional y Europa.
El Corredor Mediterráneo es un proyecto que se plantea 15 ó 20 años vista. Si las administraciones no comienzan a trabajar de inmediato, todo el tiempo perdido habrá que sumarlo a esos años. Si abanderamos un espíritu conformista, estaremos renunciando al futuro.
Por eso, continúa Landaluce, desde el Partido Popular vamos a seguir luchando por conseguir que sean los dos proyectos. Por tanto, no comprendemos que ciertos sectores de la economía muestren un talante que denota un conformismo que, hoy por hoy, no tiene razón de ser.
El diputado popular se pregunta quién se hará responsable de que el desarrollo económico de la comarca y de su puerto quede hipotecado por no poder contar con las conexiones que permitan dar salida a las mercancías desde el puerto. ¿Cómo explicaran a sus hijos que otros puertos del arco mediterráneo cuentan con una infraestructura moderna y adecuada para dar salida y mover mercancías aquellos que hoy reniegan del Corredor Mediterráneo?
La apuesta por el Campo de Gibraltar, en este caso hablando de infraestructuras ferroviarias, debe ser máxima, concluye Landaluce, y esta va a ser la línea que va seguir el Partido Popular, que no va renunciar a cualquier mejora que a lo mejor no vemos a corto plazo, pero de las que, a buen seguro, se van a beneficiar las futuras generaciones.