Aguirre ha hecho estas declaraciones en una entrevista en Antena 3 donde ha abogado por cambiar el actual "sistema electoral de listas proporcional" por un "sistema mayoritario", aunque ha admitido que ese cambio no garantizaría que en las candidaturas de los partidos no figurasen personas imputadas.
"Yo he visto alcaldes imputados por tonterías, como por romper el precinto de una obra que era imprescindible para su pueblo", ha indicado la presidenta, que se ha mostrado partidaria de "entrar a fondo" para saber la verdadera causa de la imputación.
Ha reiterado que ante la más mínima sospecha de que un político pudiera haber utilizado su cargo público para enriquecerse, lo que debe hacer es "asumir su responsabilidad" y tratar de "defenderse desde fuera" para después volver a la vida pública si se demuestra que esa sospecha no era verdadera.
En cuanto a la polémica de los trajes del presidente valenciano Francisco Camps, ha señalado que si hubiese estado en su lugar hubiera buscado la factura y los hubiera pagado, aunque después ha matizado que "cada uno es cada uno".
La presidenta se ha mostrado partidaria de emplear "el sentido común" para diferenciar lo que es un simple regalo a un político, como los broches que le regalan a ella "por la calle" algunas señoras o las pastas que le envían las monjas, de lo que hoy se denomina "cohecho impropio", un delito que, ha dicho, "se han inventado ahora" pues no existía cuando ella estudiaba Derecho.
Según Aguirre, cuando afirmó que en sus listas no hay imputados de Gürtel no pretendía "ni mucho menos" afear una conducta de Mariano Rajoy y ha contestado con un rotundo "sí" cuando ha sido preguntada si se sentía "querida y apoyada" por el presidente del PP.
Respecto a si es partidaria de limitar los mandatos, ha indicado que eso debería ser "una decisión personal" de cada político y ha comparado los 14 años que estuvo Felipe González (PSOE) al frente del Gobierno de España con los ocho que estuvo Aznar (PP).
Particularmente, ha dicho que lo que le preocupa ahora es renovar su mandato en la Comunidad de Madrid y que luego "pensará" en su futuro, pero ha asegurado que nunca estará en el cargo "treinta años como lleva el PSOE en Andalucía o 28 como lleva el alcalde de Getafe", el socialista Pedro Castro, porque no le parece "positivo".