La comisaría de La Línea informó ayer que la actuación, que se ha saldado con quince detenidos, comenzó el pasado diciembre cuando tuvo conocimiento de la existencia de una red de ciudadanos rumanos que, al parecer, se dedicaba a traer mujeres a España para que ejercieran la prostitución.
Según la Policía, las mujeres eran obligadas a prostituirse en la vía pública y en clubes de alterne de las tres provincias.
La Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsificación (UCRIF) de La Línea desplegó un dispositivo de vigilancia y seguimiento.
Denuncia de víctima
La presentación de una denuncia por parte de una de las víctimas, que se acogió a la condición de testigo protegido, ratificó los datos recabados por los investigadores.
La Policía averiguó que la organización captaba a mujeres en Rumanía ofreciéndoles “un trabajo digno y bien remunerado”, pero cuando llegaban a España las obligaban a prostituirse hasta que pagaban la deuda contraída, “algo que nunca se producía, ya que eran sancionadas continuamente por los miembros de la red ante supuestos incumplimientos de sus normas”.
Una vez identificados algunos de los miembros del grupo delictivo y constatada su importante implantación interprovincial, las comisarías de Policía de las provincias de Cádiz, Málaga y Asturias se sumaron a la investigación, coordinadas desde Madrid.
El equipo obtuvo indicios “suficientes” para concluir que los investigados estaban incurriendo en delitos de trata de seres humanos, relativos a la prostitución y pertenencia a organización o grupo criminal.
Una vez localizados los lugares de explotación sexual, vehículos y domicilios, el pasado 17 de mayo empezó la fase operativa de la denominada operación Damas.
Los grupos policiales de La Línea, Málaga y Gijón montaron un servicio de seguridad sobre los domicilios de los implicados, tras lo cual efectuaron quince detenciones (nueve en Sabinillas, uno en La Línea y cinco en Gijón).
Entre los detenidos se encontraban los máximos responsables de la organización y todos han sido acusados de sendos delitos de trata de seres humanos relativos a la prostitución y pertenencia a organización o grupo criminal, salvo una persona, que ha sido imputada por una infracción a la Ley de Extranjería.
La Policía Nacional considera que la organización ha quedado completamente desarticulada con esta intervención.
