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Huelva

El timo inmobiliario llega a la red

Proliferan en Huelva los anuncios fantasma en las webs de anuncios clasificados donde se ofertan pisos en alquiler

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  • Un piso en alquiler -

España es el país de la picaresca, y no es un tópico, sino una realidad. La variedad de timos es tan amplia como cartas hay en una baraja y evolucionan de la mano de la sociedad. Así, las estafas han ido adaptándose a los nuevos tiempos y ahora han llegado también a Internet, ese mundo virtual en el que todos navegamos.

Si el timo sigue vigente en la actualidad, es porque sigue habiendo incautos que aún creen que les van a dar duros por pesetas. Por eso hay que estar ojo avizor en la red ante suculentas ofertas o precios de ganga, también en el mundo inmobiliario, donde la estafa ha hecho su aparición.

El ‘modus operandi’ es el siguiente: el estafador/a pone un anuncio en los portales de anuncios de alquiler donde oferta un supuesto piso en la mejor ubicación de la localidad, con las mejores características, con la percha de “todo incluido” y con una renta de alquiler por debajo de la media que marca el mercado inmobiliario. Una vez que el interesado se pone en contacto con el supuesto propietario (vía email), empieza el teatro.

Casualmente, el dueño del piso reside en el extranjero y le es “imposible” desplazarse hasta la localidad para mostrar el piso, pero no hay problema. Se puede efectuar el pago del mes de alquiler más la fianza a través de una empresa que opera en Internet y, supuestamente, en el plazo de dos días tienes las llaves del piso y el contrato para firmar. Además, aseguran que el dinero no llega a manos del propietario hasta que el interesado visita el piso (una vez tiene las llaves) y está de acuerdo.

Esto ha sucedido en Huelva y al menos han sido dos los pisos ofertados mediante esta fórmula fraudulenta, aunque posiblemente sean muchos más. Verónica García es una de las afectadas, y según ha relatado a Viva Huelva, ya se ha topado con dos de estos anuncios desde que inició su búsqueda de piso a principios de verano.

El primero fue a finales de julio, cuando tras solicitar información sobre un piso (espectacular en las imágenes) de dos habitaciones y garaje en el centro de Huelva (calle San Salvador), recibió un email de un tal Samantha Galeano en el que, en un tono muy amable -y en inglés, aunque aseguraba ser italiana- ponía todas las facilidades posibles para el alquiler del piso. Tras la respuesta de García solicitando una visita al piso vino la negativa de la supuesta propietaria y toda la explicación sobre la forma de pago a través de Internet.

En ese momento, García desistió del piso y prosiguió su búsqueda, pero un par de semanas después recibió respuesta de otra oferta de alquiler y, sorpresa, se trataba del mismo email pero con otro nombre. Ahora era una tal Silvia Colombo, pero el texto era exactamente el mismo, incluso la descripción de su familia. Es decir, lo que vulgarmente se llama un ‘copia y pega’.

Desgraciadamente, estos timos son más frecuentes de lo que puede creer la gente, y si en este caso Verónica García no cayó en la trampa, en otras ocasiones la estafa sale bien y el afectado se queda con un agujero en la cartera, con una sensación de impotencia y con la frustración de tener que añadir a la ya estresante búsqueda de piso el estado de alerta para no volver a caer.

Recomendaciones
Por ello, desde Facua Huelva (Federación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Andalucía) aconsejan “verificar que el arrendador es el dueño del piso a través de los registros de la propiedad, aunque si se envía dinero, debe garantizarse que el destinatario es el auténtico propietario para evitar casos de suplantación de identidad”.

Del mismo modo, según han explicado a Viva Huelva, recuerdan que “el envío de remesas de dinero es más peligroso que una transferencia bancaria, ya que generalmente las entidades financieras permiten revocarlas en un determinado plazo”.

Facua-Consumidores en Acción advierte que estos intentos de estafa a través de webs de anuncios clasificados donde se ofertan pisos en alquiler están proliferando, y “aunque normalmente los precios son bajos y sólo se ofrece un correo electrónico como medio de comunicación, también hay casos de precios acordes al mercado y teléfonos móviles de contacto”.

Por todo ello, la mejor de las recomendaciones es no alquilar un piso sin haberlo visto antes y sin haber firmado un contrato. Eso y, citando de nuevo el refranero popular: “Abre el ojo y te ahorraras enojos”.

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