El Puerto

“Hemos intentado poner nuestro granito, haciendo una oposición útil”

Siendo aún adolescente, a García de Quirós le picó ese gusanillo llamado ‘política’. “Mis primeros pasos fueron en el Instituto Pedro Muñoz Seca, intentando sacar un periódico y después de eso me he ido enganchando a lo largo de los años”.

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  • GARCÍA DE QUIRÓS -

La pasada semana, el hasta ahora secretario general del PSOE de El Puerto, Ignacio García de Quirós, renunciaba a su acta de concejal conseguida en los comicios municipales de 2011. Ahora, dice, comienza una nueva etapa más centrada en lo laboral y en la que, señala, dedicará ese tiempo que antes no tenía a la familia y a los amigos.

—Imagino que dejar el acta de concejal debe haber sido una decisión meditada, ¿no?
–Sí, lo que ocurre es que desde el mes de febrero tenía muy claro cuál era la hoja de ruta, considero que mi proyecto político está en una fase que no generaba mayor adhesión y que se tenía que producir un relevo en la persona a la que le he ido cediendo el espacio, tanto en el
Pleno, como en algunas iniciativas importantes que hay que defender. Ahora mismo recuperando la condición de militante de base y el espacio que me corresponde dentro de la agrupación local
de máxima lealtad al nuevo proyecto político que está creciendo en El Puerto, y trabajando como un militante más.

—¿Qué balance de estos años al frente del PSOE local de El Puerto?
–La verdad es que estoy francamente satisfecho. Es obvio que los resultados electorales no han sido los que hemos trabajado, pero acato la decisión soberana de las urnas, lo que han expresado los ciudadanos de El Puerto y me voy satisfecho, pero con la sensación de que no he culminado un proyecto por el cual me he presentado. Hay satisfacciones muy positivas, sobre todo, ayudar a los que más lo han necesitado y a las personas que peor lo han pasado y entregándome por mi ciudad. Una dilatada experiencia que me ha enseñado a crecer como persona y como político y es el mejor balance que me llevo, pero nunca he creído en segundas partes y considero que hay espacio para que se desarrollen nuevos proyectos.

—¿Cuál diría que ha sido el mejor momento de estos años?
–Ha habido momentos muy buenos, como cuando tuve la oportunidad de dirigir un área tan complicada como la de Medio Ambiente, donde había que poner orden y lo conseguimos cuando quitamos el famoso Instituto Municipal para la Conservación de la Naturaleza que era como un segundo Ayuntamiento donde se controlaba casi toda la política municipal. Ese espacio de estos trece años ha sido muy bueno, y, sobre todo, compartirlo con mis compañeros de grupo, con los concejales que han estado en los proyectos en los que yo he participado.

—¿Y el peor?
—El peor fue cuando nos tuvimos que tragar un pacto de gobierno por salvar la Diputación, un pacto totalmente cerrado y que nosotros conseguimos abrirlo y renegociar los acuerdos que había, que se habían cerrado en Cádiz, gracias a la generosidad de las dos partes. No fue un plato de buen agrado, aunque luego la relación personal no ha sido mala, pero ha sido momento que en mi carrera política me ha marcado que fue el hecho de la inhabilitación del anterior alcalde que nos cogió con responsabilidades de gobierno y que marca el devenir de los acontecimientos.

—¿Cuáles cree que son las principales necesidades de la ciudad y el modo en que deben abordarse?
—Las mismas que el día que entré en la primera lista en el año 1999. No está inaugurado
el Ayuntamiento, no está el puente construido, no está el Plan General y las desigualdades se han ampliado entre los que más tienen y los que menos tienen. La política de impuestos no es la
más acertada, la política económica que tiene este equipo de gobierno es la peor terapia que se puede aplicar a un enfermo y la miopía política que ofrece este equipo de gobierno nos está llevando a la ruina. Evidentemente, no puedo estar satisfecho porque se tendrían que haber
mejorado muchísimas cosas. Nosotros hemos intentado poner nuestro granito de arena, haciendo una oposición útil y constructiva y no se ha recibido ningún respaldo por parte de este equipo de gobierno que vive al margen de todos los movimientos que se están produciendo.

—¿Qué nos traerá la nueva etapa de David de la Encina?
—Primero, unidad; segundo, lealtad; tercero, el carácter tolerante; y, desde luego el talento que tiene una persona bien formada que conoce y sabe leer los problemas que tiene la opinión pública y una persona que se entrega por la defensa de los intereses generales. Tenemos garantías que en esta dirección local va a haber esa proximidad características del grupo socialista.

—¿Es esto un adiós?
—No, nunca digo adiós, la puerta siempre estará entreabierta, porque considero que aún soy joven y siempre se puede aportar en política y voy a estar pendiente de lo que me exijan mis conciudadanos para ayudarles en la medida de lo posible

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