“Me parece muy bien la iniciativa del dueño de El Copo de crear otro albergue, porque si en lugar de 30 camas hay 100 mucho mejor, sobre todo ahora que hay tantos desahucios”. Así recibía ayer Isidoro Macías, el conocido como Padre Pateras, la noticia adelantada por este diario de que el propietario del conocido restaurante palmoneño quería contribuir a dar cobijo a los sin techo.
Sin embargo, no pudo evitar ironizar sobre el considerable retraso en la reapertura de su local, donde tiene previsto ubicar también un albergue, y que, logrado desde 2011 el permiso municipal, sigue pendiente del visto bueno autonómico. “A ver si le dan más rápido los permisos al otro albergue”, manifestó.
Macías se lamentó de que “por un asunto burocrático” y “teniendo 30 camas y un edificio nuevo y flamante” tenga que negar cobijo a personas necesitadas que acuden a él para pedirle ayuda. “Sólo les podemos dar de comer”, apuntilló.
Isidoro Macías recordó que “ya hemos enviado toda la documentación” que la Junta les había solicitado para la apertura del recinto, y que han invertido al menos 1.600 euros en las adaptaciones para las evacuaciones demandadas por Bomberos. Sólo queda que los inspectores de la Junta visiten el centro y den el visto bueno.