La portavoz de EH Bildu, Laura Mintegi, ha manifestado que quiso "reivindicar la memoria de las víctimas" cuando señaló en el Parlamento que el asesinato de Fernando Buesa fue de "origen político" y podría haberse "evitado" mediante el diálogo. Asimismo, ha advertido de que "las interpretaciones posteriores" realizadas han "falseado el sentido de mis palabras".
En rueda de prensa celebrada en Bilbao, Mintegi ha remarcado que todo el mundo en la Cámara vasca fue consciente del "sentido profundo" de sus afirmaciones y de que eran una "reacción ante lo que me pareció una frivolidad respecto a las víctimas".
Además, ha atribuido la polémica a un "interés partidista", ya que "dicho lo mismo una semana más tarde no ocurre nada, mientras que un día concreto provoca la petición del Fiscal del Estado al del País Vasco para que presente una querella".
Tras incidir en que el trabajo por la paz está "por encima de siglas y de Parlamentos", Mintegi ha manifestado que todo el mundo fue consciente en la Cámara vasca del "sentido profundo de mis palabras" y de que eran una "reacción ante lo que me pareció una frivolidad respecto a las víctimas".
"Salí reivindicando la memoria de las víctimas. Lo sabe todo el mundo en el Parlamento y las interpretaciones posteriores que se han hecho han falseado el sentido de mis palabras", ha considerado.
En este contexto, ha remarcado que dicho "lo mismo" una semana más tarde "no ocurre nada, mientras que un día concreto provoca la petición del Fiscal del Estado al del País Vasco para que presente una querella".
A su juicio, ha quedado "en evidencia" qué fue lo que ha motivado esta actuación, "un interés partidista momentáneo". "El objetivo era retrasar la creación de la Ponencia porque en aquel momento no se sentían cómodos y una semana más tarde han conseguido movilizar al resto de fuerzas para sentirse cómodos", ha advertido.
Tras incidir en que si es grave lo que afirmó al hablar de presos políticos debería ser "igual de grave una semana después", Mintegi ha defendido que ha quedado "en evidencia" la existencia de "intereses partidistas" que tratan de "camuflarse con agravios políticos".
"Luego hay una cobertura estatal para hacer ver una cosa que no es. Nos parece grave este uso de instituciones y el intento de empañar el nombre de las personas por intereses partidistas", ha afirmado.
En este contexto, ha calificado de "poco edificante" la situación creada y de "sarcasmo" el "alarde" que, a su juicio, hicieron este viernes "algunos partidos" destacando el "esfuerzo tan enorme que habían hecho para estar en la Ponencia" de Paz, mientras "simultáneamente" no se valora el esfuerzo de otras formaciones, "a pesar de este tipo de maniobras incriminatorias y de estar acusados de una posible inhabilitación de uno o dos años".
Por su parte el parlamentario de la coalición soberanista Julen Arzuaga ha señalado que el debate mantenido este viernes en el Parlamento tuvo como parte positiva el que "todos pudieron expresarse en términos constructivos sobre la posición de cada uno", aunque ha advertido de que, al igual que hace siete días, se utilizaron términos como "presos políticos, conflicto político o resolución política" y, sin embargo, "no se generó ninguna polémica".
"Nos hace pensar que la polémica de hace una semana, el pataleo y follón montado por el Partido Popular venía teledirigido a conseguir algún rédito político que tomó la forma de querella contra Laura Mintegi", ha valorado.
Asimismo, ha calificado de "decepcionante" el que este viernes se pagó" precio político a la actitud del PP" al "facilitarse su entrada en la Ponencia a costa de romper puentes con EH Bildu".
"Creemos que se dinamitó el puente que habíamos construido para acercarnos a esa Ponencia y sobre los escombros de este puente se ha establecido un vado para que el PP llegue con más comodidad", ha añadido.
