Almería

El presunto encubridor del crimen de Míriam no saldrá de prisión hasta 2015 por una condena previa

El mismo juzgado acordó suspender en septiembre de 2012 el ingreso en prisión de Raúl R.F., a la espera de que el Tribunal Constitucional (TC) resolviese sobre la admisión o inadmisión a trámite del recurso de amparo que presentó contra la sentencia firme dictada en octubre de 2010

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Raúl R.F., imputado por el secuestro y muerte de la niña onubense de 16 meses Míriam en Fiñana (Almería) y para quien el juez instructor de la causa decretó el miércoles libertad sin fianza, no podrá abandonar el centro penitenciario de El Acebuche hasta en año 2015 al tener pendiente de cumplimiento una pena de dos años y tres meses de prisión por maltratar a su exnovia, menor de edad.

   Así lo han indicado a Europa Press desde el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). El Juzgado de lo Penal número 4 de Almería ordenó la liquidación de la condena en firme poco después de que fuese detenido el 28 de diciembre y se dictase su ingreso en la cárcel por encubrir presuntamente el crimen.

   El mismo juzgado acordó suspender en septiembre de 2012 el ingreso en prisión de Raúl R.F., a la espera de que el Tribunal Constitucional (TC) resolviese sobre la admisión o inadmisión a trámite del recurso de amparo que presentó contra la sentencia firme dictada en octubre de 2010 que le condenaba a dos años y tres meses de prisión por maltratar a su novia, menor de edad.

   El TC inadmitió a trámite el recurso de amparo a finales de noviembre y el traslado de la decisión no llegó al Juzgado de lo Penal número 4 hasta "mediados de diciembre de 2012". Cabe recordar que la bebé fue secuestrada el día 20 de ese mismo mes por Jonathan Moya y que su cuerpo sin vida fue recuperado del interior de una balsa de riego el día 28.

   Según la sentencia, Raúl R.F., de 25 años, sometía a frecuentes agresiones físicas y verbales a su novia, a quien propinaba "puñetazos en la barriga y bofetadas" y a quien se dirigía con términos vejatorios e insultos, además de llegar a controlar su forma de vestir y las relaciones con sus amigas. Sobre él también pesaba en el momento de ese juicio otra condena en firme previa por agredir de forma brutal a un joven en una discoteca. En este caso, el Juzgado de lo Penal número 1 le condenó en 2010 a seis meses de cárcel y al pago de 4.000 euros a la víctima por las lesiones causadas.

   El auto notificado este miércoles a las partes personadas en la causa por el crimen de Míriam decretaba la libertad sin fianza aunque ordenaba la entrega del pasaporte y la personación en sede judicial los días 1 y 15 de cada mes. Asimismo, el magistrado Jesús Miguel Hernández dictó una orden de alejamiento a 500 metros de la madre de la víctima, gema Cuerda, quien reside en Palma del Condado (Huelva).

   El fiscal de la causa informó favorablemente a la revocación de la prisión provisional de Raúl R.F. después de la incorporación a las diligencias de un informe del Instituto Nacional de Toxicología, con sede en Sevilla, en el que se que concluía que no se había "detectado el perfil genético" de Raúl R.F. en las muestras analizadas pertenecientes a las prendas que vestía Míriam cuando su cuerpo fue hallado sin vida en una balsa de riego. Esta diligencia se sumaba al hecho de que el principal imputado, Jonathan Moya, se retractó del testimonio que prestó ante la Guardia Civil para, entre otros aspectos, "exculpar totalmente" a su amigo.

   En su nueva versión de los hechos, Moya González aseguró "no tener nada que ver" con el crimen y señaló que la madre de la pequeña "conocía en todo momento dónde estaba su hija y tenía conocimiento de muchas cosas de este asunto", un extremo que Gema Cuerda desmintió de manera "tajante" este martes ante el juez. Asimismo, habría acusado "claramente" del crimen a otras dos personas sin relación con la causa hasta el momento y que, según su letrado, "tendrían relación con el mundo de la prostitución".

   El último informe pericial incorporado a autos revela que la presencia de un perfil genético "desconocido" en las muestras analizadas procedentes de la ropa de la bebé, por lo que el juez acordó que se le tomasen muestras de ADN a la tía paterna de Jonathan Moya y a la madre de la víctima para su cotejo.

"TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO Y ASFIXIA MECÁNICA"

   La niña de 16 meses, natural del municipio de Palma del Condado (Huelva), permaneció en paradero desconocido durante ocho días tras ser secuestrada. El cuerpo sin vida de la víctima fue encontrado el 28 de diciembre en el interior de una balsa de riego ubicada junto a una vía de servicio de la autovía A-92 y a una distancia de apenas unos 500 metros del cortijo familiar donde fue arrestado el principal implicado en los hechos, quien en su nueva versión de los hechos asegura que "ni siquiera estaba presente cuando falleció".

   Según los datos que trascendieron del informe preliminar de la autopsia, la bebé habría muerto entre "dos y cinco" días antes de que se hallase aunque el juzgado instructor sigue a la espera de que se recibir los resultados de las muestras remitidas al Instituto de Toxicología de Sevilla para determinar el momento exacto en el que se produjo la muerte. También reveló que sufría un "traumatismo craneoencefálico y asfixia mecánica", lo que descarta en un primer momento que el deceso fuese accidental. El segundo de los imputados, Raúl R.F., era detenido horas después que su amigo.

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