Sevilla

Condenado por abusar de una niña de 6 años tras jugar con una consola

La Audiencia de Sevilla ha condenado a dos años de cárcel y el pago de 12.000 euros de indemnización a un hombre de 31 años que abusó sexualmente de una niña de 6 años tras ganarse su confianza jugando con ella a una videoconsola y tras montarla en la máquina excavadora con la que trabajaba

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai

La Audiencia de Sevilla ha condenado a dos años de cárcel y el pago de 12.000 euros de indemnización a un hombre de 31 años que abusó sexualmente de una niña de 6 años tras ganarse su confianza jugando con ella a una videoconsola y tras montarla en la máquina excavadora con la que trabajaba.

Una sentencia de la Audiencia de Sevilla, a la que ha tenido acceso Efe, dice que el acusado J.C.C.D., de 31 años, entró en la tarde del 15 de marzo de 2011 en una vivienda de Coria del Río (Sevilla), jugó con la niña a la videoconsola y luego le bajó la ropa y abusó sexualmente de ella, además de mostrarle sus genitales.

El acusado negó en todo momento los hechos pero la sentencia le condena por las pruebas periféricas consistentes en la declaración de la madre de la niña, a quien la víctima le contó lo sucedido al día siguiente, el médico coordinador del programa de Pediatría Social del hospital de Valme y el Equipo de Investigación de Casos de Abuso Sexual (EICAS).

El acusado aprovechó para cometer los abusos que la cuidadora de la niña no se encontraba en ese momento en la vivienda, pero esta persona relató en el juicio que J.C.C.D. se había ganado la confianza de la niña en días anteriores, aprovechando que estaba haciendo una instalación eléctrica en dicha calle, y la montó en la máquina retroexcavadora con la que trabajaba.

El acusado negó los abusos y otros aspectos del caso como haberse ganado la confianza de la menor mediante juegos, y aportó su propio testigo de descargo que, según la sentencia, reconoció que no trabajó todos los días, como había hecho el procesado.

Junto a la condena de dos años de cárcel, la sentencia otorga a la niña una indemnización de 12.000 euros porque aunque sea "imposible determinar o cuantificar el daño moral, la menor no solo se ha visto dañada en su indemnidad sexual sino que ha tenido que sufrir las exploraciones médicas y psicológicas, más la declaración judicial para esclarecer los hechos".

Todos estos extremos "sin duda han afectado a su normal desarrollo psíquico", dice la sentencia.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN