Según denunciaron los alumnos afectados, desde que solicitaron la mencionada tarjeta el pasado mes de septiembre, a estas fechas aún no cuentan con ella, lo que les ha supuesto un incremento en el desembolso del trayecto de algo más de 100 euros en relación a lo que les correspondería pagar como universitarios, según recalcó una de las alumnas, Lidia Moreno.
Y es que el precio del billete hacia Málaga cuesta unos 4,67 euros, mientras que el descuento con la tarjeta lo reduciría en algo más de un euro.
A este respecto, el responsable de explotación de la empresa Casado, Fernando Rodríguez, explicó que el problema se solucionará “en un breve plazo de tiempo”, después de adaptar las tarjetas para canjear el billete a un nuevo sistema de billetaje, en el que la compañía de transporte “ha invertido algo más de 35.000 euros”, explicó.
Respecto al pago por los trayectos, Rodríguez confirmó que estudiarán cada caso de manera pormenorizada para determinar la posibilidad de desembolsar el dinero. No obstante, a los alumnos no les convencen estas “buenas palabras”, ya que según afirmaron desde la empresa les negaron esta posibilidad. “A nosotros ya nos confirmaron que está opción ni se la planteaba, no entendemos porque antes los medios muestran otra cara”, continúo Moreno.
Otras de las quejas de los estudiantes se centran en el medio de transporte que a determinadas horas realiza el trayecto hacia Málaga, pues según denuncian no reúne las condiciones óptimas para el transporte de viajeros. “Se trata de un microbús en el que vamos apelotonados como si fuésemos ganado”, resaltó la misma alumna afectada.
