Sevilla

Condenado un ladrón que escaló a una vivienda y fue retenido por su dueño

Un juzgado de Sevilla ha condenado a tres años y ocho meses de cárcel a un ladrón que escaló una vivienda y fue sorprendido por su dueño, que forcejeó con él y luego lo persiguió por la calle y lo retuvo hasta que llegó la Policía

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai

Un juzgado de Sevilla ha condenado a tres años y ocho meses de cárcel a un ladrón que escaló una vivienda y fue sorprendido por su dueño, que forcejeó con él y luego lo persiguió por la calle y lo retuvo hasta que llegó la Policía.

Una sentencia del juzgado penal 9, a la que ha tenido acceso Efe, explica que el acusado Fernando G.L. accedió a mediodía del 3 de abril del 2013 a un patio interior de la calle Duque Cornejo de Sevilla, trepó por la pared hasta una vivienda del primer piso y entró por una ventana de la cocina.

El ladrón se apoderó de diversas joyas y cuando fue sorprendido por el dueño esgrimió contra él una navaja multiusos y se abalanzó sobre él, tras lo cual se entabló un forcejeo.

El acusado logró huir y se fue desprendiendo de diversas joyas, si bien fue alcanzado por el propietario del piso, que logró retenerlo hasta la llegada de la Policía, que recuperó en sus bolsillos parte de los efectos robados, precisa el fallo.

La sentencia se basa en el testimonio "contundente" del dueño de la vivienda, junto al hallazgo en poder del imputado de varios de los objetos robados y el relato del policía que inspeccionó el lugar del suceso y certificó que el acusado trepó ayudándose de los cierres de la ventana del piso inferior y que dejó manchas en la fachada.

La sentencia aplica al acusado la agravante de haber usado un arma peligrosa, en este caso una navaja multiusos aunque la víctima dijo en su primera declaración que no lo vio bien y que creía que era un cúter.

El ladrón alegó como atenuante la psicosis esquizofrénica que padece desde hace once años, pero la juez responde que "no hay dato objetivo alguno que permita afirmar que estuviera afectado por un brote psíquico que anulara por completo sus facultades intelectivas y volitivas" cuando cometió el robo.

Junto a la pena de cárcel, la sentencia impone al ladrón el pago de 270 euros por las lesiones causadas, 428 euros por los daños en la vivienda y 776 euros por los efectos sustraídos.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN