El parlamentario del PP Rafael Ruiz Canto criticó ayer el “silencio cómplice” del PSOE-A de Jerez al respecto de las presuntas irregularidades cometidas por el concejal Abraham Granadino como propietario de la empresa de trabajo temporal Gralett en la. En concreto, Ruiz Canto se refirió a unos cursos que esta empresa debía ofrecer a extrabajadores de Delphi, por la que percibió 30.000 euros de la Junta de Andalucía, y a otros cursos de formación cuyo desarrollo ha sido criticado por sus propios alumnos al incumplirse el compromiso de contratación.
El parlamentario popular dio por hecho que ha existido “una trama perfectamente organizada” para favorecer a cargos socialistas con la concesión de ayudas públicas, “como ya se ha visto en otros casos”, de ahí que a Granadino se le hicieran adjudicaciones “de hasta 120.000 euros para otras acciones formativas sin haber justificado lo anterior”.
No en vano, Ruiz Canto advirtió de que “no puede ser casualidad que los socialistas tengan tanta suerte con los cursos de formación”, al resultar adjudicatarios de ayudas públicas para favorecer la inserción laboral a pesar de no haber justificado subvenciones anteriores, como ocurre en el caso de Granadino. “Las casualidades no existen, las causalidades sí, y la trama, evidentemente, está, y está ya en los juzgados”, apostilló.
De acuerdo con la ley
El concejal socialista aseguró por su parte que todos los cursos que ofreció su empresa “cumplieron escrupulosamente la normativa y superaron los controles de calidad”. Granadino sí reconoció que algún curso en concreto no cumplió el compromiso de contratación que había permitido su adjudicación, admitiendo la posibilidad de que llegado el caso se vea obligado a reintegrar el dinero a la Administración por incumplir los objetivos que se habían establecido.
Desde el PSOE, por su parte, instan al PP a acudir a los juzgados y presentar denuncia “si es que tienen datos”, asegurando que Granadino ya ha ofrecido sus explicaciones al partido.