Jerez

¿A qué juegan Ricardo y cía?

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Con lo fácil que es decir las cosas con claridad y  con lo inútil que es enredar más la madeja y jugar al despiste y Ricardo García y Juan Bastos y poco más, porque parece que Energy son ellos y solo ellos, se empeñan en ir por el camino más complejo, por el de la patada hacia adelante, el de la distracción, el de la mentira, el del escondite. Y es que la segunda parte de una junta general de accionistas que, a este paso, no va a terminar nunca ,volvió a ser otro mamarracho, aunque en esta ocasión adobada por una inocentada adelantada a su tiempo como la que el ínclito Bastos aportó cuando habló de un chino que quería hacerse con las acciones del Xerez Club Deportivo, pero que no entró porque nadie confiaba en este consejo de administración. Mire usted, presunto secretario de un también presunto consejo de administración. si aquí viene un tío con euros, con muchos millones de euros dispuesto a invertir en el club y en la ciudad tenga usted la seguridad de que se le pone la alfombra roja para que asuma el poder, como se la han puesto al asiático que ha comprado el paquete mayoritario de acciones del Valencia. Si un tío quiere invertir en Jerez, en una ciudad fagocitada por el desempleo, lo primero que tiene que hacer no es hablar con García o con usted sino irse al Ayuntamiento y ver por dónde tiene que tirar. Pero en el Ayuntamiento de Jerez o en el de Santurce, porque los proyectos tienen su puerta para entrar y no precisamente a de atrás. La mentira del chino fue tan desafortunada que hasta el propio Ricardo García tuvo que puntualizar como pudo para salir airoso de una situación que provocó unas carcajadas que hasta Federico el Breve las terminó escuchando en la orilla del río Plata. 
¿Para decir esa extravagancia había que convocar una junta general de accionistas? ¿Para no aclarar absolutamente nada del accionariado y solo para anunciar querellas y más querellas? Para qué tantas querellas. Por qué el dinero de esas querellas no se pone  en el club que está sin un euro para comprar aspirina. Ricardo dice que se ha puesto mucho dinero en el club y los que están en el entorno del mismo lo desmienten. ¿Para qué mentir más? Ricardo sigue insistiendo que si el club no es viable tendrá que pedir la liquidación ejerciendo de asustaviejas para aquellos que quieren que el club siga existiendo. Si él entiende que no es viable, que no lo es, que entregue las llaves y las acciones. Dice que no es el momento de entregarlas. Claro que no es el momento. El momento era haberla entregado cuando Chapín empezó a gritar en su contra y en la de Jesús Gómez cuando aquella entrada lamentable en el club. El momento no era entrar cuando se hizo, sin un euro, prometiendo Gallardo, sí, el que ahora dice ser el máximo accionista, que se iba a hacer una ampliación de cinco millones de euros. Ni un euro había en los bolsillos de Energy, porque si bien es cierto que Tebas ayudó todo lo que pudo y más para que el equipo cayese en las catacumbas del fútbol amateur, no es menos cierto que si hubiese habido dinero Energy hubiese pagado a los jugadores, se hubiese evitado el descenso y después llegarían todas las querellas que pudiesen llegar. Pero no había dinero. Ni había ni hay.
En estas circunstancias a uno solo le cabe preguntarse que  a qué juega Energy. Qué es lo que pretenden los señores de Energy. Me supongo, que a lo peor es mucho suponer, que lo que pretenden es ganar tiempo al tiempo e intentar sacar alguna tajada, económica claro está, de donde puedan sacarla a cambio de pedir la liquidación o no sé qué gaitas.
Decía Juan Miguel Becerra esta semana pasada en Cope Jerez que estaban dispuestos, si falta hiciese, a luchar contra Energy. Y es que Energy, evidentemente, no es culpable de la bancarrota azulina, pero sí es cierto que si se compra una empresa te responsabilizas de esa empresa y Energy tomó por el atajo, dejó que el equipo cayese en la Andaluza y lo ha dejado a su suerte y en manos de unos aficionados que hacen todo lo que pueden y algo más. Algo parecido, recuerden, a lo que hizo Morales cuando dijo que no tenía dinero y dejó al equipo, que no las acciones, en manos de quien llegase y finalmente Curro Garrido fue el que puso la manteca en forma de casi dos millones euros para salvar el descenso administrativo de un equipo que once meses después ascendía a Primera División con Morales dándose un baño de multitudes en vestuarios y en Plaza del Arenal cuando él no había puesto absolutamente nada para que el equipo pudiese salir a competir. Quien debería haber estado ahí era el empresario Garrido, que fue quien permitió que el equipo siguiese en Segunda División. Igual que ahora, quienes permiten que el equipo siga compitiendo son los miembros de la Gestora, aunque si éstos no estuviesen quizá Ricardo hubiese dado con otros, porque parece que Energy juega a mantenerse en el Xerez, aunque las acciones no valgan nada, para preparar querellas contra los concursales y el Ayuntamiento y con los 2 millones de euros de subvención de por medio.
Miren, por donde, a lo mejor, sin pretenderlo, hemos dado con el quid de la cuestión y de ahí el interés por mantener el paquete accionarial y no dárselo a los xerecistas, a lo mejor ahí está todo el meollo, incluida la aparición de  Gallardo y su intención de más pronto que tarde tener la mayoría de un accionariado aunque detrás existan veinte millones de euros de deudas. Qué más da, si no tienen intención de pagarlas...
 

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