Desgraciadamente llega el cierre de una gran iniciativa cultural, sobre arte contemporáneo, en el Muelle de las Delicias. Se acabó Container-Art.
Las administraciones sevillanas han demostrando dejadez y menosprecio, dejando morir un proyecto de arte contemporáneo que aúna arte actual y su interés por el medio ambiente, convirtiendo el río de Sevilla en contenedor de arte y cultura contemporánea.
El proyecto Container-Art estaba ubicado en la puerta de entrada fluvial de Sevilla y era la primera visión que los miles de visitantes que acceden a la ciudad, por el rio, se encontraban. Ahora se toparán con un espacio cultural y expositivo vacío.
La intención de los responsables del proyecto fue, desde el primer momento, mostrar una Sevilla contemporánea, moderna y viva. Durante la corta vida de Container-Art, en este espacio han grabado televisiones de Francia, Holanda y Alemania, y también se llevó a cabo la grabación de un máster sobre espacios de innovación cultural, por parte de la Universidad de Berlín, en el que se pone como ejemplo a esta iniciativa y a Sevilla.
La actividad comenzó en marzo de 2013 con iniciativas culturales paralelas que ya no tendrán lugar donde desarrollarse. Ocho exposiciones, más de un centenar de artistas con una media de cuatrocientas personas presentes en cada exposición. Número nada desdeñable teniendo en cuenta que por la poca, o nula, flexibilidad de las normas de las autoridades portuarias sevillanas sólo se les permitía abrir el espacio un día en semana y sólo durante unas pocas horas.
El proyecto jamás se vio beneficiado por ningún tipo de ayuda institucional, ni económica ni de ningún otro tipo. Los responsables tenían que hacer frente a un canon mensual desproporcionado, dado el poco tiempo del que gozaban para hacer rentable esta actividad.
Desde Container-Art se asegura que no han recibido comunicación alguna, por parte de ninguna institución, interesándose por la problemática que los ha llevado irremediablemente al cierre.
Las reacciones, por parte de los artistas sevillanos y los usuarios de cultura y arte contemporáneo de Sevilla, no se han hecho esperar. En diferentes redes sociales se pueden leer mensajes de apoyo al proyecto y sus responsables, y de rabia ante una nueva prueba de que a nuestros políticos no les interesa, ni lo más mínimo, la cultura, ni ninguna actividad que tenga que ver con ella. Una prueba fehaciente de esta falta de interés es el hecho, confirmado desde Container-Art, de que tras cursar invitaciones a los responsables de la Autoridad Portuaria para todas y cada una de las actividades que se han desarrollado, jamás hicieron acto de presencia en ninguna de ellas.
La indignación es patente y en muchos de estos mensajes se le recuerda, a los políticos, con responsabilidad en estas actividades culturales, que los espacios públicos deben ser para el público, la sociedad civil que los paga, y que cerrados no sirven de nada. Son espacios que deben permanecer abiertos, dando un servicio a los ciudadanos, y para nada convertirse en negocio para las instituciones.
Habrá que estar atentos para estar informados a partir de ahora de las actividades se desarrollarán en este espacio en el futuro y las fórmulas de adjudicación utlizadas.
