La Audiencia de Málaga ha confirmado la condena impuesta a un hombre por amenazar e insultar a su madre y por pegar una bofetada a su hermano de 13 años en el transcurso de una fuerte discusión ocurrida en el domicilio familiar en la localidad de Torremolinos. Así, se ratifica la pena de prisión y la prohibición de acercarse al menor durante dos años.
Los hechos sucedieron en diciembre de 2014. El acusado residía en dicha vivienda y durante una fuerte discusión, primero dio una bofetada en la cara al hermano, sin causarle lesiones, tras lo que empezó a golpear los enseres de la casa y empezó a decir: "Tengo ganas de matar", expresión que generó miedo en ambos familiares. Además, insultó a la madre.
Por estos hechos, se le condenó por un delito de maltrato, a la pena de nueve meses de prisión y prohibición de acercarse al hermano durante dos años a menos de 500 metros; y por dos faltas, una de amenazas y otra de vejaciones, por las que se le impusieron 16 días de localización permanente y el alejamiento de la madre durante seis meses.
La sentencia fue recurrida por la defensa, que alegó que la única prueba de cargo es la declaración del hermano, influido por la madre; y que el temor de ésta no es tal. Pero la Sala rechaza los argumentos y considera que hay pruebas en contra suficiente, independientemente de "lo deseable que debe considerarse la recuperación de la relación familiar".
El Tribunal señala que la declaración de la madre cumple los requisitos necesarios, destacando que la mujer dijo que pese a la actitud de su hijo siempre había tratado de dialogar con él. Además, señala que su versión se ha mantenido "sin fisuras ni contradicciones" a lo largo del procedimiento y que viene corroborada por la del menor.