El Ayuntamiento de El Puerto de Santa María ha mostrado su pesar por la pérdida del rejoneador y ganadero Fermín Bohórquez Escribano, a quien se ha referido como "todo un referente del mundo taurino y una personalidad muy vinculada a El Puerto de Santa María".
En un comunicado, el Ayuntamiento ha explicado que durante la novillada que se celebrará el próximo sábado en la localidad se guardará un minuto de silencio en su memoria.
El rejoneador, ganadero y empresario Fermín Bohórquez Escribano ha fallecido este jueves a los 83 años de edad. Según ha detallado, la ganadería de su padre, el senador y diputado Fermín Bohórquez Gómez, influyó en la vocación taurina y ecuestre del futuro jinete y criador de bravo que debutó como rejoneador con 26 años cumplidos en un festival celebrado en la localidad gaditana de
Ubrique.
Después de presentarse como profesional en Pamplona tomó la preceptiva antigüedad en Madrid en 1962 lidiando un astado de su propio hierro. Fermín Bohórquez no faltó a la Feria de san Isidro durante más de 20 ferias consecutivas y su nombre tampoco faltó en los carteles de la especialidad a lo largo de casi tres décadas, aunque la de los 70 del pasado siglo XX fue la de sus mayores triunfos en los ruedos.
Fue espaciando sus actuaciones a finales de los ochenta pero se mantuvo en activo hasta 1993, cuando el 9 de octubre, encabezando un festejo coral de ocho rejoneadores, se retiró definitivamente de la profesión en Jerez de la Frontera aunque no fuera la última vez que salió a caballo a una plaza.
A pesar de la edad y el inevitable deterioro físico, volvió a vestirse de corto para hacer un paseíllo testimonial en una corrida nocturna --organizada para homenajearle-- en El Puerto de Santa María en agosto del 2011.
El reconocido rejoneador y ganadero sentía especial predilección por la Real Plaza de Toros de El Puerto y fue uno de los impulsores de la tradicional corrida nocturna de rejones de la localidad portuense.
Bohórquez Escribano estaba casado con Mercedes Domecq Ybarra y era padre de seis hijos, el mayor de los cuales, también llamado Fermín, ha perpetuado el nombre de su padre en los principales carteles del arte del rejoneo hasta su retirada en la temporada del 2015.