Apenas una quincena de los 600 miembros de la bolsa de peones promovida en 2013 por la sociedad municipal Limpieza Pública y Protección Ambiental (Lipasam) para sus contrataciones temporales, constituida definitivamente el pasado mes de agosto de 2016, han asistido a la concentración promovida por el colectivo ante el Ayuntamiento de Sevilla, socio único de la empresa, según manifestaba a Europa Press una portavoz del colectivo.
Esta portavoz, en ese sentido, ha manifestado que las movilizaciones necesitan "más implicación" por parte de los miembros de la nueva bolsa de empleo, exponiendo que tras la temporada navideña, podrían no mediar nuevas contrataciones eventuales en Lipasam "hasta Semana Santa", pese a que aspectos como las bajas deberían desencadenar nuevos llamamientos.
Esta movilización sucede a una protesta previa del colectivo y a una ronda de contactos con las fuerzas políticas del Ayuntamiento, fruto de la cual fue aprobada por unanimidad una moción del PP que reclamaba transparencia sobre "el orden de prelación" en las contrataciones eventuales, apostando además por "equiparar" a los colectivos relacionados con las contrataciones temporales, revisando para ello el convenio colectivo y los respectivos reglamentos de Lipasam.
"Se le está dando más prioridad a los 300 empleados de la antigua bolsa, que hasta se rigen por otro reglamento con más ventajas y compromisos, cuando nunca superaron criterio alguno de selección, lo que está generando un enorme agravio comparativo respecto a los contratados de la nueva bolsa, que sí han accedido con criterios de igualdad y transparencia", avisaba aquella moción del Grupo popular.
LA NUEVA BOLSA DE PEONES
A esta nueva bolsa de empleo temporal, promovida desde 2013 y que incluía exámenes médicos o una prueba psicotécnica celebrada ya en 2014, entre otros aspectos, concurrieron unas 4.000 personas y su tramitación quedó suspendida al ser el procedimiento impugnado por el propio comité de empresa de Lipasam.
El portavoz del comité de empresa de Lipasam, Antonio Bazo (CCOO), manifestaba al respecto, en declaraciones a Europa Press, que los sindicatos impugnaron esta bolsa de empleo en defensa de cerca de 400 personas que habían formado parte de la anterior bolsa de empleo y que las autoridades pretendían que concurriesen a la convocatoria relativa a la nueva bolsa de empleo, para seguir siendo objeto de las contrataciones temporales de Lipasam. El comité de empresa, en ese sentido, reclamaba que a estos miembros de la anterior bolsa de empleo, "dados los años que venían prestando servicios, se les reconociese la condición de trabajadores fijos discontinuos".
Finalmente, el litigio quedó desbloqueado en 2016, gracias a un acuerdo en el seno del Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla), tras lo cual el pasado mes de agosto, Lipasam publicó la "lista definitiva de candidatos" de la nueva bolsa de empleo, con los nombres concretos de un total de 600 personas, toda vez que en octubre, y también merced al acuerdo en el Sercla, Lipasam publicaba su 'Reglamento de regulación de indefinidos no fijos por tiempo discontinuo'.
LA ANTIGUA BOLSA DE EMPLEO
En dicho reglamento, recogido por Europa Press, se especifica que "se consideran trabajadores indefinidos no fijos por tiempo discontinuo aquellos eventuales procedentes de la bolsa de empleo temporal de 2005, que fue sustituida en 2009, y que integraran la citada bolsa a 31 de diciembre de 2012 y cuyos contratos han tenido un carácter cíclico a lo largo de estos años", figurando en el mismo un total de 330 personas, con contrataciones temporales justificadas por las fiestas primaverales, los planes de verano o Navidad y los "posibles refuerzos" necesarios.
El caso es que con este escenario sobre la mesa, un grupo de los miembros de la nueva bolsa de empleo de peones denuncia que las contrataciones "llegan a cuentagotas" porque recaen mayormente sobre los empleados indefinidos no fijos, es decir los miembros de la antigua bolsa de empleo, pese a que los mismos "entraron por la puerta de atrás" en Lipasam, en referencia a que para la antigua bolsa de empleo no habría mediado un proceso selectivo basado en principios de mérito y capacidad.
La nueva protesta de los trabajadores de la nueva bolsa de empleo de Lipasam ha coincidido, por cierto, con las concentraciones que casi a diario celebran ante el Ayuntamiento los empleados que fueron contratados de manera intermitente por esta empresa municipal entre 2013 y 2016, precisamente para contrarrestar la suspensión de la nueva bolsa de empleo como consecuencia del mencionado litigio judicial.
Este otro colectivo denuncia su "exclusión" de Lipasam, dado que con la ya descrita resolución del conflicto, todas las contrataciones eventuales son canalizadas a través de los empleados declarados indefinidos no fijos y la bolsa de empleo de 2013, toda vez que el Ayuntamiento defiende que no les puede incorporar como tal a Lipasam, sin contar con un "respaldo legal".