“No queremos una policía represiva sino preventiva”, esta afirmación del presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos Unidad, Francisco Velasco, fue compartida anoche por los otros tres representantes vecinales invitados al programa A Debate de Ondaluz Sevilla TV.
Una idea en la que incidió de manera especial el portavoz de la plataforma Torreblanca Unida, Sergio Serrato, quien manifestó que la implantación o no de la policía de barrio “es un problema de voluntad política”, sobre todo después del acuerdo unánime del último pleno para que este cuerpo especial se establezca de manera experimental en dicho barrio antes del 30 de junio. Según Serrato, “si han votado la mayoría y no se hace, nos sentiríamos defraudados”.
Una policía que también desearían tener en Nervión, donde, según dijo el presidente de la Asociación Nervión Unido, Luis Carrero, “preferimos llamar al 091 porque vienen enseguida porque está allí la comisaría, que al 092”. Mientras, la portavoz de la plataforma Alfalfa Degradada, la procuradora Silvia de Carrión, prefirió apelar a la sensibilización ciudadana y al comportamiento cívico de los vecinos en muchas situaciones, antes que tener que acudir a la represión policial.
Las opiniones de unos y otros también fueron bastante unánimes en cuanto a la necesidad de mejorar los cauces de participación de los movimientos vecinales en la gestión política, especialmente a través de una mejor representatividad en las juntas municipales de Distrito.
Respecto a la regulación de los veladores en otras zonas más allá del eje más turístico marcado por el gobierno de la ciudad, también hubo coincidencia en que es imprescindible corregir el problema de exceso derivado de un “abuso” anterior, pero especialmente en atajar el uso indiscriminado de la vía pública, tanto por negocios de hostelería como por otros. “Es que han sacado el mobiliario a la calle”.
Mayor diversidad de opiniones hubo respecto al funcionamiento de las relaciones entre el equipo de gobierno y los movimientos vecinales. Mientras el presidente de de la federación y el portavoz de Torreblanca Unida reconocieron cierta facilidad en el trato con los respectivos distritos, tanto la portavoz de Alfalfa Degradada como el de Nervión Unido criticaron duramente las dificultades de comunicación, argumentando la existencia de “mails sin contestar y reuniones sin convocar” por para terminar asegurando que “antes teníamos a los políticos más accesibles”.
