El muñeco de Michelín que ocupa una de las rotondas que da acceso a Jerez Norte desde la AP-4 puede pasar a la historia en apenas unos meses si el Ayuntamiento y la compañía no renuevan el contrato de patrocinio suscrito hace ya diez años como compensación a los 300.000 euros que la empresa aportó para Speed Festival, un proyecto que nunca llegó a ejecutarse.
El convenio por el que se condonó aquella deuda expira el próximo 14 de marzo y el Consistorio es consciente de que en estos próximos meses debe empezar a mover ficha para tratar de renovarlo o, en caso contrario, instar al desmantelamiento del emblema de esta firma de neumáticos, que tiene un peso aproximado de dos toneladas y más de nueve metros de altura.
En estos términos se expresó en el último Pleno municipal el teniente de alcaldesa de Urbanismo, Dinamización Cultural, Patrimonio y Seguridad, Francisco Camas, que avanzó su intención de iniciar conversaciones con la empresa “con tiempo prudencial” para tratar de llegar a algún tipo de acuerdo satisfatorio para ambas partes. “Nosotros pondremos unas condiciones para que este reclamo publicitario siga allí y en caso de que no sean aceptadas tendrá que ser desmontado”, explicó.
La historia de la rotonda
Michelín fue una de las compañías que aportó capital para el desarrollo de Speed Festival, un proyecto que abanderó Pedro Pacheco y que no llegó a ejecutarse. Una vez que se descartó el proyecto, la firma de neumáticos solicitó la devolución de los 300.000 euros que había aportado, ya con Pilar Sánchez como alcaldesa. Ante la imposibilidad de sacar ese dinero de las arcas municipales, se ofreció a la empresa la colocación de Bibendum -que así es como se llama el muñeco- en una rotonda por un periodo de diez años.
La escultura, realizada por Gonzalo Martín, forma parte del paisaje cotidiano de la ciudad desde el 26 de marzo de 2008. Habrá que ver si en estos próximos meses se renueva este acuerdo publicitario o si Bibendum desaparece de la rotonda a la que ha venido dando nombre.
