La inauguración de la Feria de San Miguel no pasó ni mucho menos desapercibida para cientos de arcenses ávidos de vivir sus fiestas. Debajo del pórtico situado junto al Paseo de Andalucía, el equipo de Gobierno tuvo a bien ceder el privilegio de encender el alumbrado extraordinario a la presidenta de la Asociación Sociocultural Entretelas Teatro, Noemí Cerredo, quien, emocionada, dio el pistoletazo de salida a las fiestas. Desde que tomó posesión del cargo, el Gobierno arcense invita a algún colectivo representativo de la ciudad para llevar a cabo el simbólico encendido.
Otra de las estampas que dejó la jornada inaugural fue la presencia de las molineras el último carnaval convertidas estos días en reinas y damas de la feria. Juntas, acompañaron a la comitiva municipal dirigida por el alcalde de Arcos, Isidoro Gambín.
A partir de ahí el recinto ferial tomó el protagonismo en la velada inaugural, tal vez con menos niños y familias en torno a las atracciones, que en Arcos se conocen popularmente como ‘los cacharritos’, pero con un excelente ambiente en las casetas.
La jornada inaugural de la feria fue también una ocasión reivindicativa: el movimiento LGTBIQ de Arcos y la Sierra llevó a cabo una campaña para evitar insultos y agresiones con la diversidad sexual, de lo cual se encargaron las asociaciones Delta y Arco Iris.
Lo mejor de la feria está por llegar. El viernes actúan los grupos locales Repenke y Nómada, así como los dj’s malagueños Les Castizos, mientras que el músico arcense Borja Rubio hará lo propio el sábado. Para cerrar la feria, la noche del domingo actuarán los copleros Cintia Merino y Nico García. Los fuegos artificiales pondrán colofón a cinco noches y cuatro días de fiesta total en Arcos.