Lo que en el sector de turismo son buenas noticias, hablamos del aumento de los de visitantes en la provincia, para los sindicatos este dato alentador trae consigo una cara B. Y es es que según explicaban ayer desde CCOO, “el incremento de turistas que viven en nuestra provincia lleva aparejado un aumento de IPC superior al nacional”.
Argumentaban que mientras en España el índice está en el 1,6 % , en Málaga alcanza el 3,1 por ciento y que esto lleva a los pensionistas y jubilados a perder poder adquisitivo. Así, lo explicaba ayer en rueda de prensa el secretario provincial de comisiones Obreras, Fernando M. Cubillo que añadía que “ una pensión de un profesor, de un enfermero o de un diplomado se ve repercutida con una caída de más de 850 euros al año en Málaga de su capacidad de compra”. Además, añadió que el sistema de pensión puede y deber ser sostenible: “No se puede decir que los planes de pensiones son la solución, porque no lo son para ese 40 por ciento de trabajadores que dice Hacienda que ganan por debajo del salario mínimo interprofesional”. “Tampoco es la soluciona para los parados de larga duración, ni para los trabajadores temporales ni para los que tienen jornada parciales”,esgrimían mientras anunciaban que seguirán con las movilizaciones para conseguir que se lleven a cabo sus propuestas de solución como el incremento coyuntural de los dos puntos de cotización o la ejecución de políticas de empleo que favorezcan la creación de puestos de trabajo entre otras.
Por su parte, el secretario general de la Federación Andaluza de Servicios de CCOO,Íñigo Vicente, criticó también este lunes que “las cifras récord” del turismo contrasten con “la precarización” del empleo en el sector y reivindicó el “desbloqueo” de los convenios de Hostelería que como en Málaga se abren en 2018 Málaga para que “las cifras récord del sector lleguen a quienes las hacen posible, las trabajadoras y trabajadores de la Hostelería, en forma de empleo digno, medidas contra la precariedad e incrementos salariales proporcionales”.
Igualmente, el sindicato aboga por “acabar con la cara B del Turismo, construyendo un modelo turístico sostenible y socialmente responsable, basado en la calidad del servicio y la estabilidad del empleo, frente a modelos cortoplacistas, centrados en maximizar el beneficio a costa de la competencia desleal y el dumping o las externalizaciones”.