Las asociaciones de vecinos no han cobrado la subvención asignada desde el área de Participación Ciudadana, a pesar de haber entregado la documentación y justificado sus actividades en septiembre de 2017, y llevan tres meses, desde principios de año, esperando optar a las ayudas que están comprometidas con las distintas entidades.
Esto supone que las asociaciones de vecinos no cuentan con el apoyo suficiente para su mantenimiento y funcionamiento, por lo que algunas no pueden pagar sus gastos corrientes, como local, luz y agua, como ha ocurrido en ocasiones anteriores desde que en 2015 entrara a gobernar el pacto de PSOE e Izquierda Unida, así como sus actividades, que no se pueden poner en marcha o continuar realizando.
Días del socio, convivencias, actividades puntuales con motivo de las distintas efemérides, fiestas locales, talleres, formación, etc, se ven en peligro, e incluso algunas no se han podido realizar hasta el momento, por lo que los vecinos consideran que no es justo que el equipo de Gobierno juegue con sus intereses.
La asociación de vecinos San Marcos indica que “cumplimos con nuestras obligaciones de justificación, tal y como se recoge en la ordenanza” de Participación, por lo que “exigimos que se cumpla con los plazos o se articulen unos calendarios” de pagos.
La junta directiva de Sudamérica, dirigida por Milagros Muñoz, ya apuntó el lunes que las entidades vecinales se sienten “el patito feo” del área de Participación Ciudadana, entendiendo que éstas no cobran, mientras que otras entidades de otra índole sí lo hacen.
San Marcos también ha señalado que van a continuar desarrollando las actividades programadas en el plan de actividades 2017-2018, pese “a no contar con la subvención concedida” por el Participación Ciudadana. Además, remarcan que “el trabajo que venimos realizando en el barrio, siendo la primera voz de alerta y alarma sobre los problemas que se originan, no está pagado con ningún tipo de subvención, no obstante al tratarse de fondos públicos, fondos de todos, no pedimos nada que no sea nuestro y para todos”.
El presidente de Ronda de Valencia, José Luis Cárdenas, apunta que “al igual que otras asocaiciones, estamos a la espera de la subvención, necesaria para hacer frente a algunos gastos” y actividades, que “no se pueden hacer si no se tiene una ayuda”. Así, Ronda de Valencia tiene pendiente en marzo el Día del Socio, que está en el aire, así como la continuación de las ludotecas, que ayudan y hacen mucho bien a los niños del barrio.
Sudamérica, Los Frailes y Ronda de Valencia tienen pendiente una actividad, ‘Concienciar sobre violencia de género’, que hasta el momento no tiene fecha de inicio porque hace falta dinero para poder pagar al monitor/a en materia de defensa personal.
Otras asociaciones han confirmado a este medio que no habían cobrado sus ayudas, sin entender por qué el equipo de Gobierno, que se define como social y dijo apostar por la participación, no cumple con sus compromisos. De otro lado, señalan que, si no quieren apostar por la participación, tienen una oportunidad única de “retratarse” y dejar claro a las entidades vecinales que “no están de nuestro lado, y quieren romper con el compromiso de aportar un grano de arena a nuestro mantenimiento y funcionamiento”, mientras otros colectivos “sí cobran, y bastante. Pero quizás es para mantenerlos calladitos y que no den la lata. Lo que no saben los políticos es que podemos dar mucha guerra si nos lo proponemos, así que esperamos que no nos tiren de las orejas porque estamos dispuestos a pelear”.
Y es que, las asociaciones de vecinos, como bien se definen, son el intermediario entre los vecinos y el Ayuntamiento, siendo el primer ojo que ve las necesidades y reivindicaciones de cada barrio, poniéndolo en conocimiento del Consistorio para que les den una solución. Además, realizan gestiones que, de otra manera, se quedarían sin realizar, apostando por la formación de sus vecinos, haciendo posible talleres para los más pequeños, un lugar de encuentro para niños y mayores, poniendo en marcha campañas de concienciación que de otra manera no se harían realidad, cuidando los barrios, etc.
La Flave, en este sentido, asegura que “no hay fecha de cobro”, según explica su presidenta, Milagros Muñoz. “En teoría, si en septiembre se presenta la documentación, y se elevan los reparos, a principios de año” deberían haber llegado las ayudas. “Pero en cambio hemos llegado a esta fecha y las actividades no se pueden realizar o se retrasan. Así, habrá poco tiempo para realizarlas y justificarlas, y sino se realizan ya en febrero habrá que pedir nuevos certificados, porque vencen”.
En otro orden de cosas, Muñoz indica que este mes de marzo tiene que hacerse efectiva la primera parte de la subvención de 2018 correspondiente a la Flave, como bien contempla el convenio firmado entre la federación y el Ayuntamiento, por lo que “ahora esperamos respuesta para las asociaciones, y en marzo para la Flave”.
El descontento es generalizado, ya que ni en las calles se contempla el compromiso del equipo de Gobierno con los ciudadanos, ni tampoco a la hora de formalizar su acuerdo con las asociaciones de vecinos, que canalizan los problemas de los propios vecinos hacia el Consistorio. Además, llega un momento en que se muestran cansados de tener que “mendigar” lo que les corresponde, una ayuda que tampoco “nos soluciona la vida.
Parques que merecen más atención
Una de las reivindicaciones de las asociaciones vecinales está relacionada con la falta de mantenimiento que sufren los parques infantiles, que no son tantos como los que desearían los ciudadanos y tampoco presentan la imagen que necesitan los niños.
Asociaciones que no paralizan sus actividades
La asociación de vecinos San Marcos ha celebrado este miércoles su actividad con motivo del Día de Andalucía, consistiendo en un desayuno andaluz y proyección de un documental y fotografías, al que invitaron a vecinos y ciudadanos en general.
Los pasos de peatones requieren un pintado
Los pasos de peatones requieren de cierta atención por parte del equipo de Gobierno, por lo que los vecinos y sus representantes necesitan de un pintado, ya que la gran mayoría está en unas condiciones de deterioro bastante amplio.
Los barrios están sucios y los vecinos, descontentos
No hay vecino ni asociación de vecinos que no denuncie el estado en el que se encuentran las calles y los barrios de la ciudad, en general sucios, y por tanto, los ciudadanos se muestran descontentos ante la actuación del equipo de Gobierno al respecto.
