Verdemar Ecologistas en Acción Campo de Gibraltar ha anunciado que denunciará a la empresa Acerinox S.A. por “los vertidos atmosféricos que se produjeron el pasado 4 de septiembre sobre las 17.00 horas. La gran columna presentaba un color amarillento que cubría una zona importante de los alrededores de la acería”.
“El olor que se percibía procedía de las instalaciones de la factoría, probablemente algún tipo de ácido mezclado con otros componentes. Vecinos de la barriada de Palmones, en Los Barrios, alertaron al Centro de Coordinación de Emergencias del 112, presentando todo tipo de explicaciones por problemas respiratorios, malestar en la garganta y otros síntomas debido el aire irrespirable provocando una situación de salud incómoda”, explican los ecologistas.
Esta situación, añaden, “se viene repitiendo de forma sucesiva, procediendo a alertar al 112 en numerosas ocasiones. Estas emisiones e inmisiones de gases y partículas que caen encima de la población son cada vez más frecuentes. Sin ir más lejos, el día 7 de septiembre sobre las 22.00 llamaban los ciudadanos desde el barrio del Lazareto, también en Los Barrios. El olor a acería era intolerable según contaban, uno de los vecinos afirmaba que esta situación se ha agravado desde la ampliación de la acería”.
Según Verdemar, “las correcciones que se hicieron sobre los impactos por las emisiones e inmisiones denunciadas en los últimos años sólo han servido para ampliar la producción sin que los ciudadanos y el medioambiente hayan nota algo. Las partículas metálicas y otros contaminantes vuelan según el viento, afectando a la salud de los ciudadanos, la flora y fauna de la comarca”.
Para el colectivo ecologista, “además de todo lo anterior habría que sumar los continuos ruidos tan molestos y que están influyendo en el descanso de los ciudadanos de Palmones y Guadacorte, en Los Barrios, y de Guadarranque, en San Roque, descontrolando su vida y estado de salud”.
Recuerdan que “la legislación y doctrina, tanto española como europea ha señalado hace ya tiempo que la atmósfera es un bien común indispensable para la vida respecto del cual todas las personas tienen derecho a su uso y disfrute y la obligación de su conservación. En este sentido la contaminación atmosférica continúa siendo motivo de seria preocupación en España y en Europa. Todos los datos existentes ponen de manifiesto que aún existen niveles de contaminación con efectos adversos muy significativos para la salud humana particularmente en las aglomeraciones urbanas. En concreto en el caso de España se ha demostrado que en nuestro caso estos problemas se ven agravados por nuestras especiales condiciones geográficas y atmosféricas. Un caso relevante en esta materia es la comarca del Campo de Gibraltar debido a su especial concentración industrial”.
En el Campo de Gibraltar “existen instalaciones petroquímicas, acerías, eléctricas, portuarias y similares, rodeando la Bahía de Algeciras, influyendo en los estuarios de ríos, contaminando el aire, estas instalaciones industriales rodean la población”, señalan los ecologistas.
La concentración industrial en este espacio, indica Verdemar, provoca “un efecto acumulativo de emisiones que perjudica a la salud pública. En 2018 se generaron a la atmósfera más de 10 millones de toneladas de sustancias peligrosas, entre ellas algunas tan peligrosas como el benceno o las partículas finas. Con estos datos se puede concluir que la contaminación atmosférica en un problema de primer orden y que es necesario por parte de la Junta de Andalucía corregir estas graves deficiencias”.