Los 20.000 euros con los que está dotado quiere dedicarlos precisamente a eso: a salir de lo ignoto y montar una de sus obras, algo que hasta ahora le ha sido muy complicado “porque en Madrid es muy difícil conseguir que una sala te programe”, señaló en declaraciones a Efe poco después de que ayer a mediodía le telefoneara la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, para comunicarle la decisión del jurado.
El Premio Nacional de Literatura Dramática se concede a la mejor obra de literatura dramática editada el año anterior en español o en alguna de las otras lenguas cooficiales que se hablan en España.
Con Dentro de la Tierra, que ya recibió en 2007 el Premio Calderón de la Barca para autores teatrales jóvenes, el galardonado trata con lenguaje poético y una estructura innovadora y moderna, “marca de la casa”, asuntos como la relación con la tierra, la familia, el medio ambiente y la propia identidad.
Bezerra, nacido en Almería y residente en Madrid desde hace 13 años, considera un “honor” recibir el Premio Nacional de Literatura Dramática justo al año siguiente que su admirado Miguel Romero Esteo y aunque está “muy contento” con la distinción, a él lo que más le emociona es seguir haciendo teatro que ponga al espectador “entre la espada y la pared”.
“El teatro vive un momento muy complicado, aunque sea dulce en cuanto a espectadores y en Madrid es muy difícil montar algo. No soy nada experto en esto de las finanzas y veré qué puedo hacer”, dice.
El discurso de su teatro, con el que ya ha ganado también el premio Barahona de Soto, está arraigado en la realidad y tiene una gran ambición dramática, algo en lo que quiere seguir profundizando.
“Quiero hacer un teatro que formule preguntas al espectador y le ponga entre la espada y la pared, que le haga reflexionar, que le ponga en conflicto. No me gusta nada la evasión”, resume el autor almeriense.