El portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Sevilla, Álvaro Pimentel, ha exigido este martes al alcalde, el socialista Juan Espadas, que ponga en marcha "un plan urgente de conservación" que permita revertir el "olvido" al que asegura que el gobierno municipal tiene sometida a la Plaza de España.
En este sentido, ha advertido de que "son ya muchos años sin que se tomen las medidas de mantenimiento que el monumento se merece", a pesar de "los actos vandálicos que ponen en peligro su conservación" y de "la constante falta de vigilancia en su entorno", cuyos "únicos responsables son Espadas y su desidia hacia el patrimonio de la ciudad".
Pimentel ha incidido en que ya en junio de 2018 el Pleno aprobó una moción del grupo municipal de Ciudadanos para poner en marcha este plan para la mejora de la Plaza de España. Sin embargo, lamenta que un año y medio después "sigue guardada en el cajón del olvido en el que este gobierno del PSOE esconde todo lo que no le interesa cumplir, sin que exista justificación alguna para este pasotismo".
Frente a ello, ha anunciado que Cs elevará una nueva propuesta al Pleno de este jueves para que todos los grupos políticos insten al gobierno a incluir una partida específica en los presupuestos municipales para 2020 que permita "el desarrollo de un plan que garantice la conservación y el mantenimiento de este monumento".
El líder de Cs en el Consistorio hispalense ha reclamado al Pleno "altura de miras", de modo que los grupos "se sumen a la alegación que va a presentar la Asociación de Defensa del Patrimonio de Andalucía (Adepa) a las cuentas de 2020 para incluir esta partida".
Así, ha indicado que "Espadas y sus socios populistas de la extrema izquierda están a tiempo de rectificar el olvido manifiesto al que han sometido al patrimonio en los presupuestos del próximo año", incorporando algunas de estas alegaciones que posibilite que "en Sevilla se apueste por el patrimonio como referente cultural, histórico y artístico de nuestro pasado y nuestro futuro".
Pimentel también ha abogado porque se adopten "medidas concretas" para frenar "la venta ambulante ilegal" que afecta a la Plaza de España. De este modo, se acabaría con "la imagen habitual de los manteros ocupando el espacio central del monumento", lo que supone "una competencia desleal al comercio regulado" y que, además, "ensombrece la visión arquitectónica del complejo".