La presidenta de la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), María Rosario Ríos, ha destacado que el 75% de los religiosos españoles son mujeres, de las cuales "muchas" asumen "responsabilidades muy grandes", aunque no cree que estén "relegadas" a actividades domésticas, y pide "seguir avanzando" en su "reconocimiento".
"Dentro de las congregaciones femeninas, a muchas mujeres les tocan papeles de mucha responsabilidad, no diría que estamos relegadas, pero hablo más del conocimiento de los institutos por dentro; luego, sobre el reconocimiento de la vida religiosa femenina, creo que se ha caminado pero hay que seguir avanzando y nosotras nos tenemos que atrever a que se nos reconozca", ha subrayado María Rosario Ríos, en una entrevista con Europa Press, con motivo de la celebración este domingo 2 de febrero de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada.
En España, hay 409 institutos religiosos de vida activa y sociedades de vida apostólica, de los que forman parte 38.688 miembros, de los cuales 29.170 son mujeres y 9.518 son hombres. A estos hay que sumar los 751 monasterios de vida contemplativa (716 femeninos y 35 masculinos), en los que viven 8.273 religiosas y 458 religiosos, según datos a cierre de 2019. Asimismo, hay 2.419 miembros de institutos seculares, 225 vírgenes consagradas y 1.790 miembros de nuevas formas de vida consagrada.
Por su parte, el número de novicios, es decir, los que todavía no han profesado sus votos, se mantiene constante en los últimos años en torno a los 300. "El año pasado había 305 y este año 299, la diferencia no es significativa. Desde 2014, hay todos los años más de 200 novicias y unos 100 novicios, hay un grupo de novicios significativo; claro, ¿es suficiente? Depende de para qué", ha precisado la presidenta de CONFER.
ENVEJECIMIENTO
María Rosario Ríos ha indicado que en España la Iglesia está acostumbrada a una vida religiosa "muy numérica" y desde esa visión ahora "parecen pocos" pero ha precisado que, por otro lado, nadie les dice que deban tener "la misma presencia que hace 50 años" y lo atribuye también al envejecimiento de la población en general. "Si lo piensas, en la sociedad también hay menos gente joven, somos un país envejecido", ha apuntado.
En todo caso, ha señalado que un reto de este tiempo es ser conscientes de esta realidad numérica y de edad --la edad media de los religiosos es "alta" aunque la CONFER no dispone del dato concreto-- y, a partir de ahí, llevar a cabo procesos de reorganización y reestructuración para poder seguir llevando adelante su misión "de acuerdo al mundo de hoy y de acuerdo a las fuerzas".
Otros retos a los que se enfrentan, según ha añadido, son "caminar hacia lo intercultural" haciendo "fraternidades que sean testimonio de ese encuentro desde lo diverso"; y permanecer en situaciones "muy sencillas, muy cotidianas" al lado de la gente, "en los barrios, en proyectos pequeñitos".
Según ha indicado, la vida religiosa española está "viva, no replegada, sino abierta a la realidad" así como "muy implicada en el acompañamiento a los más vulnerables, a los excluidos". "Es una vida religiosa muy en red, con otros y otras que buscan una sociedad más justa, que busca servir a los demás", ha remarcado.
En cuanto al papel de los laicos, y de cara a la celebración del Congreso de Laicos que tendrá lugar el próximo mes de febrero, María Rosario Ríos ha asegurado que los religiosos "no" temen su presencia cada vez mayor sino todo lo contrario porque consideran que ambas son "vocaciones complementarias". "Ni los religiosos tenemos que ser laicos ni los laicos tendrían que ser religiosos", ha enfatizado.
PREVENIR LOS CASOS DE ABUSOS
Además, ha apuntado que en 2020 seguirán trabajando en la lucha contra los abusos gracias a los protocolos puestos en marcha por distintas congregaciones "no solo para abordar lo que se ha dado o se puede dar sino también trabajando por prevenir, por crear una cultura del cuidado".
Sobre el síndrome del 'burn out' o de agotamiento que afecta a religiosas, según publicó recientemente el diario del Vaticano, el Osservatore Romano, María Rosario Ríos ha indicado que en el caso de las religiosas españolas no diría que estén "relegadas" a tareas domésticas que les provoquen una sobrecarga, aunque ha reconocido que hay muchas mujeres religiosas de mediana edad que pueden sentir "que tienen muchas responsabilidades". "Tenemos que ver cómo esas responsabilidades no sofocan lo que es nuestra vida", ha indicado.
En todo caso, ha puntualizado que esto no quiere decir que las mujeres en la Iglesia estén todo lo reconocidas que deberían y ha pedido "seguir avanzando" en este camino, animando al mismo tiempo a las religiosas a "atreverse a asumir responsabilidades visibles".
"A veces las mujeres en la sociedad en general tenemos incorporados unos modos o unas categorías que a veces nos parece que tenemos que hacer mucho más para ser igual o nos atrevemos menos a asumir responsabilidades visibles. Como mujeres tenemos que acoger y decir sí a cosas aunque nos pueda dar más vértigo", ha zanjado.