Jerez

La Candelaria clausura un periodo de más de siete meses sin imágenes en la calle

La Reina de la Plata ha presidido su tradicional rosario de la aurora, desarrollado en buena medida en el interior de los jardines de La Atalaya

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Cargando el reproductor....

El rosario de la aurora de la Hermandad de la Candelaria ha cerrado hoy un largo periodo de algo más de siete meses sin presencia de imágenes en la calle. Este tradicional acto piadoso, que se viene celebrando desde hace ya más de medio siglo coincidiendo con el domingo dedicado a las Misiones, ha congregado por este motivo a bastante más público del habitual, aunque en ningún momento la imagen se ha visto rodeada de la multitud que hasta ahora habría podido justificar la suspensión del culto público en la calle.

No en vano se había fijado un aforo máximo de 300 personas en los jardines de La Atalaya –que es el lugar en el que se ha desarrollado buena parte del rosario- y no ha sido necesario impedir el paso a ninguna persona, quedando sillas vacías.

El cortejo partió de la parroquia de Santa Ana pasadas las ocho y media de la mañana, tomando por el pasaje dedicado a María Santísima de la Candelaria en dirección a la calle Atalaya, desde la que se ha accedido a Lealas para a continuación girar a la izquierda en dirección a Cervantes y acceder de este modo a los jardines del complejo museístico.

En la glorieta central se habían dispuesto sillas para el público en general guardando la preceptiva distancia de seguridad, mientras el cortejo circunvalaba la rotonda ajardinada. Con posterioridad la comitiva ha subido por la calle Lealas para regresar a la parroquia de Santa Ana sobre las diez y media de la mañana.

En el último tramo de Lealas se han arrojado pétalos de flores al paso de María Santísima de la Candelaria, sonando una plegaria dedicada en su honor en el que sin duda ha sido el momento más emotivo de la mañana.

La hermandad ha presentado un amplio cortejo de hermanos, todos ellos con la mascarilla obligatoria y muchos incluso con guantes. Lo mismo ha ocurrido con los portadores de las pequeñas andas sobre las que se ha colocado a la imagen.

María Santísima de la Candelaria ha lucido las galas propias del Lunes Santo, rematadas con un manto de terciopelo burdeos bordado en aplicación cedido por la Hermandad de la Exaltación.

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN