En declaraciones a la prensa en Bagdad, el miembro de la CSIE Qasem al Abudi explicó que la Comisión ha adoptado esta decisión por el rechazo público a la ley electoral expresado por el vicepresidente suní de Irak, Tarek al Hashemi.
“La Comisión Suprema ha decidido paralizar todas las actividades vinculadas a los comicios hasta que se cumplan todas las modificaciones a la ley electoral”, dijo Al Abudi, quien aseguró que “será muy difícil que las elecciones puedan celebrarse en la fecha prevista constitucionalmente”.
Tras intensos debates, el Parlamento iraquí aprobó la semana pasada varias enmiendas a la norma electoral, y ahora le tocaba refrendarlas al Consejo Presidencial.
Sin embargo, Al Hashemi pidió la modificación de la primera enmienda para elevar el porcentaje de escaños asignados a los desplazados iraquíes en otros países de un 5 a un 15%.