Los bares y restaurantes pueden cerrar desde esta pasada medianoche en Jerez a las dos de la madrugada después de que la Junta haya decidido relajar las restricciones horarias en estos establecimientos y en los del ocio nocturno, que ganan una hora más -hasta las tres- para echar la persiana. La ampliación de los horarios de la actividad en la hostelería no es la única novedad, pero sí la gran reivindicación de un sector que desde hace más de un año ha tenido que hacer frente a una desescalada con temporadas fatales en noviembre y enero, cuando la pandemia se recrudeció y les obligó a cerrar desde las seis de la tarde e incluso toda la jornada durante dos semanas.
Por esta razón, más que celebrar la flexibilización de estas medidas, el sector ha dejado claro que esta suavización de horarios “llega tarde” y reclama de nuevo “volver a la normalidad cuanto antes”, al menos en lo que a horarios se refiere. “La gente está contenta, pero venimos diciendo desde unos meses que las restricciones horarias a la hostelería nunca deberían haber existido; entendíamos que era contraproducente porque, como se ha visto, ha alimentado reuniones en las plazas que se han desbordado, porque la gente se quedaba en las calles y organizaba fiestas privadas. Seguimos diciendo que las medidas, en lo referente a horarios, no entramos nunca en tema de comensales ni distancia de seguridad -matiza- no eran necesarias, y lo seguimos manteniendo ahora con los datos que tenemos”, apunta el presidente de la Asociación Empresarial de Hostelería de Jerez, Alfredo Carrasco.
Si con los nuevos cambios el horario se aproxima más al habitual en estos establecimientos, desde el colectivo, que agrupa ya a más de un centenar de socios, dejan claro que “vamos a seguir peleando” por el ocio nocturno. “Es el sector que peor lo ha pasado. El horario de las discotecas es hasta las seis de la mañana, un horario que ayuda mucho más que perjudica”, sentencia.
Aunque no ha sido el principal caballo de batalla, las nuevas medidas de la Junta también permiten que aquellos distritos que se encuentren en el nivel 1, como Jerez, se permita el consumo en las barras de los establecimientos, manteniendo la distancia interpersonal, mientras que en los niveles 1 y 2, las mesas podrán ser de hasta ocho personas en el interior y de diez en el exterior. Un paso más que también celebran en la asociación de hostelería, aunque recuerdan que en todo lo concerniente al uso de mascarillas, distancia de seguridad y comensales no han puesto pega alguna “y nos hemos adaptado”.
Pese a todo, Carrasco hace un balance positivo del verano, especialmente de agosto, gracias al turismo nacional. “Pese a la pandemia, la gente se ha quedado más por el país y han apostado por este rinconcito de Jerez y por la Bahía, pero todo se ha concentrado en agosto. Ha sido un revulsivo importante y un agosto mejor que el del pasado año”.
En esta misma línea, tanto desde Acoje como desde la Asociación de Hostelería de Jerez no ocultan sus expectativas de cara a las Fiestas de la Vendimia, que empiezan este sábado y se prolongarán hasta el día 26. “Hay mucha ilusión y ganas y la hostelería está volcada con el concurso de tapas. Se supone que vamos volviendo a cierta normalidad tras un año tan malo”, señala la presidenta de Acoje, Nela García.