Almería

Acusado de matar al compañero en residencia discapacitados reconoce que le pisó la cabeza

Tras tirarlo al suelo en una discusión en un pasillo de este centro ubicado en Viator

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
  • Juzgados. -

El hombre con discapacidad que se enfrenta a once años de prisión por presuntamente matar a su compañero de cuarto en una residencia ha reconocido este miércoles que pisó la cabeza del fallecido tras tirarlo al suelo en una discusión en un pasillo de este centro ubicado en Viator (Almería).

“Se cagó en los muertos y mi madre está muerta. Le pisé la cabeza porque mi madre está muerta”, ha insistido el acusado durante la primera sesión de la vista oral con jurado popular que ha comenzado este miércoles, a preguntas de la fiscal, a la que ha insistido en que el fallecido “estaba enfermo” y sólo quería “irse a Linares” (Jaén).

A la abogada de Aspapros, asociación en cuya residencia tuvieron lugar los hechos y que ejerce la acusación particular, le ha indicado que el perjudicado le había pegado en otra ocasión anterior “dos guantazos” y le había dicho que lo iba a “matar”, si bien ambos se perdonaron.

A su abogado, Miguel Martínez, le ha indicado que no había trabajadores del centro con ellos y que las enfermeras tardaron “mucho” en llegar al lugar en el que se cometió la agresión.

A todos los anteriores les ha asegurado que en prisión está “mal”, ya que tiene que tomar “pastillas para los nervios” que antes no tenía prescritas, y que allí le “quitan el dinero, el tabaco” y le “pinchan”, por lo que estaría mejor en un centro similar a la residencia en la que sucedieron los hechos.

La fiscal ha incidido en su exposición inicial en que el “pisotón fue tan fuerte” que rompió el cráneo de la víctima, así como que esta agresión “totalmente desproporcionada” fue la respuesta a una “pequeña discusión, nimia, sin ninguna importancia” que fue grabada “con pelos y señales” por las cámaras de la residencia.

Sobre la discapacidad del hombre, ha sostenido que un informe de un forense del Instituto de Medicina Legal de Almería concluye que a pesar de ella no tiene anuladas sus capacidades, por lo que “sabe lo que hace y sus consecuencias”. A esto ha sumado que ya estuvo en prisión por una agresión sexual a una mujer y a la hija de ésta.

El letrado del acusado ha pedido a los miembros del jurado que “sean justos” y tengan en cuenta las circunstancias de esta agresión, sin considerar delitos “anteriores que nada tienen que ver con los hechos que se están juzgando”. Martínez busca la eximente de reconocimiento tardío de los hechos.

El escrito de acusación provisional, consultado por EFE, indica que los supuestos hechos tuvieron lugar sobre las 8 de la mañana del 12 de septiembre de 2021 en un centro para personas con discapacidad de la asociación Aspapros en Viator.

El acusado, que tiene reconocido un grado de discapacidad del 68 por ciento, se encontró con su compañero de habitación en uno de los pasillos y entabló con él una "fuerte discusión".

Presuntamente, en el transcurso de la misma, "guiado por el ánimo de atentar contra la integridad física" del perjudicado, le propinó un "fuerte puñetazo" en la cara a su compañero.

El agredido perdió el equilibrio y cayó desplomado al suelo algo que, según el fiscal, aprovechó el acusado para continuar la agresión mientras el otro hombre se encontraba tumbado boca abajo.

"Acto seguido", de "forma sorpresiva" y con "ánimo de atentar contra su vida", impactó "su pie izquierdo dejando caer todo el peso de su cuerpo contra la cabeza" de la víctima.

El perjudicado perdió el conocimiento y comenzó a sangrar "abundantemente" por el cráneo, tras lo que el acusado abandonó el lugar.

La víctima fue trasladada de inmediato al Hospital Universitario Torrecárdenas de Almería, en el que murió nueve días más tarde a consecuencia del traumatismo craneoencefálico grave provocado por la agresión.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN