Los hoteles de la barriada almeriense de El Toyo han estimado una reducción de ingresos de aproximadamente 450.000 euros en comparación con 2023, debido a cancelaciones de reservas y pérdidas en ingresos complementarios al alojamiento durante la celebración del festival de música electrónica 'Dreambeach' del 1 al 4 de agosto. Cabe destacar que este evento cuenta con el patrocinio del Ayuntamiento de Almería.
Según una nota de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Almería (ASHAL), se ha registrado un descenso en la ocupación hotelera de alrededor del 25 % en promedio, alcanzando hasta un 45 % en algunos casos, durante los primeros días de agosto en que se desarrolló la primera edición del festival en Almería capital.
A esta pérdida económica se suman los gastos adicionales que los hoteles han tenido que asumir para reforzar la vigilancia de sus establecimientos “para evitar problemas”, según la patronal almeriense. Tras evaluar con sus hoteles asociados en la Urbanización de El Toyo, ASHAL destacó el impacto negativo del festival en el sector.
Lo que “más duele” a los hoteleros, según la asociación, es la “pérdida de imagen de Almería como destino de calidad”. Hasta ahora, El Toyo ha sido conocido por atraer a turistas de alto poder adquisitivo y familias que buscan naturaleza, tranquilidad y relax, especialmente entre mediados de julio y el 21 de agosto, periodo en el que la ocupación hotelera suele superar el 90 %. “Es en este mes cuando se obtiene el 90 % de los ingresos de estas empresas”, apuntaron desde ASHAL.
La asociación planteó la necesidad de reconsiderar el modelo de turismo que se quiere promover en El Toyo, advirtiendo que la apuesta por el turismo de festivales puede chocar con la identidad turística que las empresas hoteleras han construido durante dos décadas. “Almería tiene que plantearse seriamente qué modelo de turismo quiere recibir en El Toyo porque cualquier apuesta por el turismo de festival choca con la identidad turística en la que las empresas hoteleras han trabajado durante dos décadas poniendo el énfasis en sus espacios naturales protegidos y cuidados, lo que ha supuesto esa visión de alto valor al visitante”, afirmaron.
ASHAL también destacó que este tipo de eventos “consumen infinidad de recursos públicos que se ponen a disposición de un organizador privado en perjuicio de otras empresas que llevan años apostando por el turismo de calidad en El Toyo”.
Los equipos jurídicos de algunas de estas cadenas hoteleras están analizando la adopción de las medidas oportunas para exigir indemnizaciones una vez valorados todos los costes directos e indirectos, la “brutal caída de ingresos” por servicios complementarios al alojamiento, así como los perjuicios por los impactos acústicos y medioambientales.
