Publicidad Ai
Publicidad Ai

Lo que queda del día

La semana de los vampiros: 'True blood' compite con 'Crepúsculo'

En la semana en la que el público adolescente ya reserva sus entradas para ver 'Crepúsculo', Canal+ estrena una de las series sobre vampiros más prometedoras de la televisión, 'True blood. Sangre fresca', que llega con el distintivo de calidad de la HBO

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai

A partir del jueves 4 de diciembre, en el hueco dejado por la sensacional Criando malvas, Canal+ estrena una de las series más esperadas de la temporada, True blood (Sangre fresca). No es casualidad que lo haga en el mismo día en que se estrena en cines la primera entrega de una nueva saga juvenil sobre vampiros adolescentes, Crepúsculo, aunque lo cierto es que a la hora de sopesar las ventajas de una sobre otra opción sale ganando la alternativa televisiva que llega, además, respaldada por el distintivo de calidad de la HBO, responsable de las mejores producciones televisivas de la última década, desde Los Soprano a Deadwood, pasando por Sexo en Nueva York.


 

True blood es el nuevo proyecto de Alan Ball, responsable de la serie de culto A dos metros bajo tierra y ganador del Oscar por el guión original de American Beauty. Su nueva fuente de inspiración toma como punto de partida una serie de novelas de la escritora Charlaine Harris editadas en Estados Unidos bajo la marca Sookie Stackhouse y protagonizada por unos vampiros muy particulares, que conviven de igual a igual con el resto de vecinos de una pequeña población de Lousiana. Las claves de la convivencia residen en que no necesitan de la sangre de éstos para alimentarse, ya que se nutren de una sangre artificial importada de Japón.

La protagonista de la historia es Anna Paquin (la famosa niña de El Piano a la que hemos visto recientemente en la trilogía de X-Men), una camarera que puede leer en la mente de los demás y que se enamora de un misterioso vampiro, lo que la lleva a defender la natural relación entre unos y otros en medio de una sociedad aún reacia a aceptar otro tipo de vínculos más que amistosos, sobre todo ante las misteriosas desapariciones que se producen de vez en cuando y que algunos achacan a la excesiva voracidad de algunos residentes. Sexo, peligrosas adicciones y algún que otro toque terrorífico son las sustancias que complementan esta prometedora y original aportación a los sucedáneos del Drácula de Stocker.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN