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Andalucía

La Inteligencia Artificial, un salto de eficiencia en la gestión del ciclo del agua

Esta tecnología supondrá un ahorro en agua y energía para ocho municipios del Campo de Gibraltar gracias al PERTE del agua concedido a Aqualia y Arcgisa

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  • Centro de control de Aqualia.

Sin duda alguna, la llegada de la inteligencia artificial ha supuesto una completa revolución para la tecnología tal y como la conocemos, y su aplicación ya comienza a llegar a todos los ámbitos. Aqualia y la empresa públicaArcgisa (Agua y Residuos del Campo de Gibraltar, S.A.) están desarrollando un proyecto itegral para digitalizar el ciclo del agua en ocho municipios del Campo de Gibraltar, tras la aprobación de su proyecto del PERTE de digitalización del ciclo del agua del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD).

Esto permitirá a más de 275.000 habitantes beneficiarse de las soluciones de un sistema centralizado que monitorizará los componentes de la red de suministro de agua, mejorando los procesos y la capacidad de respuesta ante incidencias. Además de reducir las pérdidas de agua el proyecto supondrá un incremento del ahorro energético en, al menos un 10% del consumo, a través de la tecnología Big Data y la automatización de instalaciones.

El proyecto, que ha tenido el apoyo de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, el Ayuntamiento de Algeciras y el Ayuntamiento de Tarifa, cuenta con una inversión total de 13,3 millones de euros, de los que 7,7 millones procederán del PERTE.

// Una automatización que permitirá ahorrar agua y energía

En el tratamiento del agua, uno de los objetivos perseguidos es el ahorro energético, que incide directamente en el ahorro de costes. Este es otro de los ejes centrales del proyecto, que incluye una batería amplia de medidas propuestas para promoverlo. Por un lado, a través de la instalación de elementos, como los dispositivos medidores que permiten la monitorización energética o los variadores de frecuencia en los motores de las bombas para ajustar el caudal. Por otro lado, la propia reducción de fugas de agua en las redes de abastecimiento, conseguida mediante la aplicación de sistemas de análisis de datos y de control y gestión de fugas, también permitirá reducir el consumo energético de forma notable.

Se estima que el conjunto de actuaciones reducirá el consumo medio de energía anual como mínimo en un 10,7% (2.517.364 Kwh), que además se traducirá en una reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera.

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