Publicidad Ai
Publicidad Ai

Patio de monipodio

Gracias ¿A quién?

Eso. ¿A quien hay que dárselas? Disculpen: no es soberbia presunción, pero algo debe tener Sevilla. Con todos nuestros respetos, y como no...

Publicado: 08/11/2024 ·
10:13
· Actualizado: 08/11/2024 · 10:13
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
  • Shakira durante su actuación en los Latin Grammy en Sevilla. -
Autor

Rafael Sanmartín

Rafael Sanmartín es periodista y escritor. Estudios de periodismo, filosofía, historia y márketing. Trabajos en prensa, radio y TV

Patio de monipodio

Con su amplia experiencia como periodista, escritor y conferenciante, el autor expone sus puntos de vista de la actualidad

VISITAR BLOG

Eso. ¿A quien hay que dárselas?

Disculpen: no es soberbia presunción, pero algo debe tener Sevilla. Con todos nuestros respetos, y como no duelen prendas, reconocidos estamos a los responsables de todas las entidades deportivas y artísticas que han traído sus eventos a Sevilla. A ellos, a las firmas patrocinadoras, al público asistente… No son criticables las fotos de un Alcalde en sí, por cuanto no es una figura a ocultar. Líbrennos Dios y el destino de caer en aquel injusto “Kodak Marcos”, con que inicuamente se pretendió desprestigiar un esfuerzo personal, ante la falta de argumentos contra su gestión.

Bienvenidas sean las finales de la Davis, de los mundiales, de los Grammy y hasta de los Oscar si un día vinieran, por supuesto; pero bueno es reiterar nuestra esperanza en la gestión también de otras acciones y otros eventos, que den nombre a nuestra ciudad y aprovechen su nombre ¿por qué no?, siempre que afiancen y aumenten su crédito internacional, que mejoren su Patrimonio y su imagen. Que, en definitiva, contribuyan a mejorar el nivel de vida de los sevillanos. Y ganar amigos, aunque no sea ese el propósito del mandante ni del aspirante a mandar en San Telmo.

Gestionar es la clave. Con una buena gestión, un Ayuntamiento es rentable; y muchos servicios, orientados al mejor servicio público, son dignos de toda alabanza, frente a los gastos para justificar pagos, como el tranvía o el tranvibús, nombres inventados para justificar una sangría al presupuesto. No sólo eso: Sevilla reúne méritos suficientes para albergar otros muchos eventos, deportivos, artísticos, culturales, económicos, porque su nombre sigue siendo mundial, a pesar del esfuerzo de las administraciones para ocultarlo. Actos que  podrían lucir como la luz de Sevilla, enriquecerla, hacerla respetada y querida, en vez de -como ahora- fomentar la inquina de otras para así justificar la total ausencia de inversiones, la mayor disminución de ellas y su –nuestro- empobrecimiento, como amenazó Bendodo.

Sevilla tiene posibilidades desconocidas por sus gestores políticos y económicos. Y no es criticable el desconocimiento, pero sí dar la espalda a la información, por el hispánico vicio de confundir poder con sabiduría al considerarse poseedores de la única verdad y despreciar así toda iniciativa que no parta de sí mismos, pecado que llevamos siglos pagando los sevillanos en vez de sus responsables.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN