Andalucía

Sanidad prepara un plan de respuesta a amenazas para la salud que evite otra covid

Permitirá activar de forma inmediata un mecanismo de reacción nada más presentarse el riesgo para evitar otro impacto como el que tuvo el coronavirus

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  • Coronavirus. -

El Ministerio de Sanidad ultima un Plan Estatal de Preparación y Respuesta frente a Amenazas para la Salud, que espera ver plasmado en un real decreto "en muy poco tiempo", y que permitirá activar de forma inmediata un mecanismo de reacción nada más presentarse el riesgo para evitar otro impacto como el que tuvo el coronavirus.

El documento, según señala a EFE el director general de Salud Pública y Equidad en Salud del Ministerio de Sanidad, Pedro Gullón, está ya muy avanzado y su intención es que "en los próximos meses", unos "2 o 3 como máximo", pueda entrar en la fase de consulta pública para iniciar su desarrollo "lo antes posible".

Dentro de un contexto de crecientes desafíos para la salud, como ha dejado de manifiesto la covid-19 y, más recientemente, el brote de gripe aviar en Estados Unidos, lo primero que hará el plan es definir no ya a nivel global, porque para eso ya se está negociando un plan de pandemias en el seno de la OMS, sino desde dentro, lo que es una amenaza para la salud pública en España.

Ello significa disponer de un sistema de evaluación que detecte, cuando llegue, una amenaza para la salud pública nacional y su gravedad para que, cuando eso pase, se activen inmediatamente los protocolos y se movilicen todos los recursos disponibles con los que hacerle frente.

Lo cual "implica, sobre todo, muchos mecanismos de gobernanza, de establecer quién tiene la responsabilidad de cada de cada cosa, cómo nos reunimos, cómo nos coordinamos con los con los planes que pueden existir en comunidades autónomas", ya que algunas tienen el suyo propio.

También dedicará una parte a la reserva estratégica de productos sanitarios, como vacunas, en función de los diferentes escenarios que puedan suponer la amenaza detectada, y todo eso "dejarlo muy bien por escrito".

Así, definiendo con claridad la amenaza en cuestión, su gravedad, el papel de cada uno y el protocolo a seguir, se evitarán las fricciones que algunas crisis sanitarias, no solo la covid, también el mpox o la dana, han traído consigo.

"No va a ser un plan como a veces se hacen algunos de solo carta, con cosas muy generales, va a ser un real decreto", y eso supone que recogerá muchas especificidades; por ejemplo, regulará la existencia de un comité de coordinación asistencial que tendrá que ser activado ante las condiciones que se concreten en la norma.

El plan ha incorporado "enmiendas muy interesantes" tras haberse discutido con varios ministerios implicados, como el de Interior por toda la parte que tiene que ver con Protección Civil o seguridad, y con las comunidades en las varias reuniones de la Comisión de Salud Pública en las que se ha abordado.

"Hay un esfuerzo colectivo muy, muy amplio, para que esto salga", celebra Gullón, que reconoce que "siempre está el miedo" a que como los recursos en salud pública no siempre están dotados como sería lo deseable, no todos vean tan sencillo movilizar los recursos.

Más allá de eso, "en general esto se ve como una necesidad clara de que de que no podemos llegar a una gran amenaza sin todo esto bien establecido", y Gullón está convencido además de que permitirá "ganar en credibilidad institucional a la hora del manejo de los recursos".

Otro de los objetivos inminentes de Sanidad, aunque confiaba en que pudiera haber sido una realidad a finales de 2024, es el de materializar "lo antes posible la Agencia Estatal de Salud Pública, pero eso está en manos del Parlamento.

Los últimos flecos de las negociaciones, asegura, "están muy avanzados" y se han incorporado gran parte de las enmiendas de los grupos para asegurar que la que la ley puede salir adelante. Enmiendas que, quiere dejar claro, "han servido para mejorar mucho el texto", como por ejemplo para clarificar las competencias estatales y autonómicas.

"Tenemos una oportunidad muy buena en nuestras manos de cubrir una necesidad que teníamos muy grande", asevera.

Una vez se apruebe la ley, habrá un plazo de seis meses para desarrollar su reglamento, una labor que confía se pueda compaginar con la dotación de los recursos humanos y la decisión de la sede, algo que está en manos de Política Territorial.

Nada puede avanzar dónde se ubicará, pero sí afirma que todas las candidatas que se han presentado "son lugares con una tradición de salud pública potente". "Creo que donde esté físicamente va a estar bien situada, pero lo importante es -puntualiza- la estructura que montemos que montemos alrededor".

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