Publicidad Ai
Publicidad Ai

Aristócratas en el fútbol

Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
De todo tiene que haber en la viña del señor, y cómo no en el mundo del balompié. Hace tiempo que en el fútbol actual, excepción hecha de algunas reminiscencias suramericanas, no se escuchan aquella retahíla de sobrenombres con que se conocían a algunos jugadores, de lo que tuvo mucha “culpa”, aquel locutor del otro, lado del océano y que en España “bautizó” a muchísimos futbolistas con nombres sacados de su chistera, me refiero a Héctor del Mar. Ya apenas suenan aquellos Burrito Ortega, Piojo López, Mono Burgos, El Buitre, Pantera Benítez, Pata Bendita, La Araña Negra, Chino Zárate, Mágico González… y ¿qué se yo cuantos jugadores tenían sobrenombre, siempre simpático y popular. Hoy día las cosas han cambiado, el mundo se estiliza, quizás por eso el Xerez no ha hecho ni p. caso del jugador jerezano Cáceres, procedente del Alavés, y es que su sobrenombre es el de “El Chusco”. ¡por favor, adonde vamos a llegar? Leo que el Xerez acaba de fichar a Íñigo Vélez de Mendizábal y Fernández Garaialde. ¡Andando!, Ese sí es un nombre de alta aristocracia, de altos vuelos, y por todo lo alto, pues creo que Íñigo mide un metro noventa y tantos. Ojalá su rendimiento sobre el césped, vaya en relación y consonancia con su impacto nominativo.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN