La Hermandad de la Macarena ha firmado un acuerdo con el taller de bordados de Charo Bernardino para restaurar el manto de los Cisneros de la Virgen de la Esperanza, una de sus piezas más emblemáticas. El proyecto contempla la recuperación integral de los bordados y el terciopelo original, tras décadas de alteraciones que han modificado su aspecto.
La restauración, ya en marcha, se basa en un riguroso estudio histórico y técnico que incluye la digitalización del diseño original del manto, confeccionado en 1967 por Guillermo Carrasquilla a partir de los bordados del palio de la Virgen realizados por José Caro en 1942. Durante los años noventa, el manto fue sometido a dos procesos de traspaso que afectaron a su simetría y estructura, algo que ahora se busca corregir.
El proyecto está supervisado por una comisión especializada en la que participan técnicos del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), como José Luis Gómez Villa, Araceli Montero y Lourdes Fernández, además del arquitecto Sergio Cornejo Ortiz, el conservador Carlos Peñuela Jordán y miembros de la Junta de Gobierno de la Hermandad.
Entre las actuaciones previstas destacan la elección de un nuevo terciopelo de seda idéntico al original, la reconstrucción del borde volumétrico del bordado y la reposición de la blonda de encaje de oro, elementos clave para devolver al manto su lectura formal y su esplendor primitivo.
Con esta intervención, la Hermandad reafirma su compromiso con la conservación de su patrimonio artístico, abordando la restauración con el máximo rigor histórico y técnico.
