La tradicional Madrugá de la Semana Santa sevillana se ha saldado con dos tumultos que han sembrado algunos momentos de confusión entre la multitud pero que no han ocasionado heridos entre los miles de asistentes, mientras en la calle Don Fradrique un varón ha resultado herido por arma blanca en una reyerta en la que habrían participado hasta diez personas y la avería de una máquina barredora de Limpieza Pública de Sevilla (Lipasam) ha obligado a varias hermandades a modificar su recorrido.
El incidente más destacable, según informaban a Europa Press fuentes de los dispositivos de seguridad, aconteció poco antes de las 01,46 horas en la calle Don Fradrique, en las inmediaciones del recorrido de la hermandad de la Macarena, que parte se su basílica a las 00,00 horas. A estas horas, se habría producido una reyerta con la participación de varias personas --quizá diez según algunos testigos--, y un varón resultó herido por arma blanca siendo posteriormente evacuado al cercano hospital Virgen de Macarena mientras la Policía Nacional se hacía cargo del caso.
En cuanto a los tumultos, habrían sido dos de diferente intensidad y en diferentes lugares y horas. Aunque no ocasionaron heridos, desencadenaron algunos momentos de incertidumbre dado el recuerdo del caos vivido en la Madrugá del año 2000 con avalanchas, carreras multitudinarias y una confusión generalizada que aún permanecen en la memoria colectiva.
En concreto, y según informaban a Europa Press fuentes oficiales y presenciales, entre las 04,15 horas y las 04,20 horas se habría producido un tumulto en el entorno de la plaza de la Magdalena y la calle Julio César, en cuya zona a las 3,45 horas parte la hermandad del Calvario desde la iglesia de la Magdalena, en la calle San Pablo, mientras la cofradía de la Esperanza de Triana recorre también la calle San Pablo pasadas las 04,10 horas.
Poco después, en torno a las 04,50 horas, se habría producido otro tumulto de menor intensidad en la calle Imagen, coincidiendo con el tránsito de la hermandad de Los Gitanos.
Finalmente, la avería sufrida en la tarde de ayer por una máquina barredora de Lipasam en la calle Tetúan obligó a varias estaciones de penitencia, entre ellas La Cigarrera y la Quinta Angustia, a modificar su recorrido a cuenta de las sustancias vertidas sobre esta calle.