Poco después de las 10,00 horas del Viernes Santo entraba en el popular barrio de la Macarena el primero de los pasos de la Hermandad, Nuestro Padre Jesús de la Sentencia, en la que aparece Cristo maniatado mientras que le leen su sentencia a muerte. A este paso le sigue el grupo de Armados de la Macarena, un escuadrón romano que custodia al paso durante todo su recorrido.
A pesar de presentar algo de retraso, unos 45 minutos después, entró la Virgen de la Esperanza Macarena en la calle Feria, donde miles de vecinos del barrio esperaban para recorrer con ella las calles cercanas a la Basílica,
En declaraciones a Europa Press Televisión, una señora que acudió a la procesión acompañada de su nieta de tres años vestida de nazareno afirmó que tenía muchas ganas de ver a la Virgen por su barrio y contó que la niña había dormido poco de madrugada por los nervios, a pesar de que se salió de la cofradía para descansar.
El nazareno que portó el libro de reglas de la Hermandad durante todo su trayecto añadió que se sentía privilegiado por poder acompañar a "la Madre de Dios" en su estación de penitencia. Durante la madrugada la cofradía realizó sin problemas su estación de penitencia a la Catedral de Sevilla.