Cierra la oficina técnica de Regadíos de Fuenteheridos

El viernes es el último día para la oficina de regadíos de la Mancomunidad ribera del Huelva, ubicada en Fuenteheridos. La fecha anunciada para la clausura de esta entidad es el próximo 31 de mayo, aunque al ser domingo, el último día hábil es hoy.
Esta oficina fue creada hace 10 años por el entonces alcalde de Fuenteheridos y presidente de la mancomunidad Ribera del Huelva, José Antonio Cortés, con el fin de crear la comunidad de regantes y prestar auxilio y asesoramiento en el tema del castañar, entre otras cuestiones relativas a los frutales de montaña.
Ahora, cuando comienzan a verse los frutos del trabajo realizado por sus técnicos, esta infraestructura se cierra. Así lo anunció su titular, la diputación provincial, a través de la responsable del área de agricultura y ganadería, Rosario Rosado, quien señaló que “existe duplicidad en cuanto al objeto de actuación, además de que la mayor parte de los objetivos para los cuales fue creada, se han cumplido”.
No comparten estos argumentos los trabajadores de la oficina en cuestión, puesto que, en palabras de su portavoz, Diego Diajara, “es ahora cuando se hace necesaria una infraestructura así, dado que en estos momentos comienza verse la luz en todos aquellos proyectos que iniciamos hace 10 años”. Entre estos proyectos, la estrella ha sido el castañar, el cual, tras una serie de conclusiones relativas a los bajos precios y al descenso de la producción, se identificaron una serie de conclusiones que hicieron que desde hace unos 5 años se iniciase la introducción de nuevas variedades resistentes a las enfermedades que aqueja la producción autóctona, con plantones traídos de Francia, así como la investigación iniciada en torno a los castañares de la sierra, o la recuperación de una variedad de uva típica de Fuenteheridos, de las huertas, a raíz de un curso de fruticultura de montaña, sin olvidar las gestiones realizadas en torno a la creación de la Comunidad de Regantes, entre Fuentehridos, Galaroza y La Nava y que, aunque va muy avanzada, aún no se encuentra operativa. “Todo esto se va al garete, señala Diego Diajara, porque no sé quién se va a encargar ahora de todo y mucho nos tememos que todo el trabajo realizado se pierda, quede archivado y duerma el sueño de los justos durante un largo período, para regresar cuando, quizás sea demasiado tarde”.
Pero hay que decir que la de la sierra no es la única entidad de este tipo que se está viendo en esta tesitura, pues la diputación de Huelva ha deicido rescindir el convenio con las cinco unidades de regadíos que existen en la provincia.
Por su parte, el presidente de la Mancomunidad Ribera del Huelva Ezequiel Ruíz, que durante todo este proceso ha ido realizando gestiones y hablando con toda serie de entidades y administraciones para evitar el cierre de la oficina de regadíos, advirtió que “esto no significa que se vaya a dejar de lado la agricultura, los productores ni los ayuntamientos de la comarca, sino que la labor continuará desde las oficinas comarcales agrarias o desde la misma diputación”. Desde esta mancomunidad se está intentando recolocar a estos trabajadores en otros puestos relacionados con su anterior trabajo, “y aprovechar sus conocimientos adquiridos durante todo este tiempo” señaló Ruíz. Esto no parece que sea a corto plazo.
Ezequiel Ruíz finalizó con el anuncio de que “las conversaciones sobre el tema no han terminado aún”.