El PSOE-A y el Gobierno andaluz interpretaron este miércoles como una victoria casi definitiva la noticia de que la Fiscalía Anticorrupción no aprecia delito en las exoneraciones que aplicaba la Administración autonómica a las empresas de formación, uno de los vértices sobre los que ha gravitado toda la polémica en torno a la supuesta trama de los cursos. El sistema para librar las ayudas era sencillo: un 75% en el inicio del curso y el 25% tras justificar que se habían realizado, pero como práctica habitual se autorizaron nuevos cursos y pagos sin la comprobación. La Fiscalía entiende ahora que esa práctica no sería ilegal porque la obligación de justificar continuaba, no se evaporaba.
El portavoz del PSOE en el Parlamento andaluz, Mario Jiménez, fue uno de los encargados de poner voz a la satisfacción de los socialistas por partida doble: porque creen que la Justicia va desmoronando la teoría de la conspiración en torno a la formación y porque la posición de Anticorrupción ha tirado por tierra el recurso del PP, su gran rival, contra la decisión que adoptó la jueza Núñez Bolaños de dejar sin efecto un auto de su antecesora Alaya que apostaba por indagar esa vía. Traducido: perderían Alaya y el PP y saldrían reforzados Núñez y el PSOE.
Tan convencido están los socialistas de su victoria que Jiménez esbozó una arriesgada teoría: preguntó en voz alta si vista la conclusión de la Fiscalía no sería el Gobierno del PP quien influyera en su día sobre la actuación judicial para remar a su favor. “No queremos pensar que algunos pronunciamientos de la Policía Judicial hayan venido condicionados por el PP y el Gobierno de España”, subrayó. De ser así, “conectaría con cuestiones que se vienen conociendo de cómo ha funcionado el Gobierno con respecto a la Policía” y eso sería “muy grave”. Jiménez insistía así en el discurso clásico del PSOE: la acusación del PP de las exoneraciones masivas son un mero artificio. La tesis la reforzó luego la propia Susana Díaz, convencida de que el PP sólo ha querido orquestar “una gran farsa” para “ensuciar la imagen” de la Junta.
El PP se aferra a las tesis de la UCO
El PP es consciente de que la Fiscalía ha asestado un duro golpe a su estrategia en torno a la presunta trama de la formación, pero ante lo que considera “especulaciones o filtraciones interesadas” recuerda que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha reiterado en varias ocasiones que existen “claramente” indicios de responsabilidad penal en el caso. Su portavoz, Carmen Crespo, prefiere “esperar”.