PP y PSOE acuerdan en el Congreso que se realice un aálisis de diferentes zonas del Golfo de Cádiz
La Comisión de Medio Ambiente del Congreso de los Diputados aprobó ayer una iniciativa conjunta de PP y PSOE en la que se pide que las zonas del Golfo de Cádiz susceptibles de acoger aerogeneradores marinos sean sometidas a estudios que descarten que la instalación de esas infraestructuras puedan ocasionar daños irreversibles en las rutas migratorias del atún rojo y otras especies.
Concretamente, la iniciativa quiere que las Áreas Eólicas Marinas de Trafalgar y las del Arco Mediterráneo, entre Tarifa y Cabo de Gata, continúen siendo zonas con condicionantes o limitaciones, de modo que para llevar a cabo cualquier desarrollo eólico se realicen los estudios necesarios, durante la fase previa y la de desarrollo piloto, que permitan descartar que los aerogeneradores marinos van a tener un impacto sobre especies de interés pesquero y comercial y aves.
Según consta en el texto pactado por los dos partidos mayoritarios, esos estudios, cuya metodología y realización deberá ser supervisada y contrastada, deberán extenderse a un ámbito geográfico mucho más amplio que el propio área de instalación de los parques eólicos marinos.
preocupación
El diputado del PP Aurelio Sánchez Ramos defendió la propuesta de su grupo asegurando que los populares tienen una “gran preocupación”, porque no hay suficientes estudios que garanticen la inocuidad de esas instalaciones y subrayó que el PP no se opone a las energías renovables ni a la instalación de parque eólicos marinos pero sí quiere que, existan garantías de que, una vez instalados, no perjudiquen a las especies pesqueras.